Palms Casino Resort, Las Vegas, Estados Unidos.
En juego el título mundial WBC del peso pluma.
Russell abriría el combate bastante activo con sus golpes rectos, manejando velozmente el jab y el directo de izquierda al rostro o al cuerpo, mientras que González se apoyaría sobre todo en derechas aisladas. Pero Russell, que se mostraba igual de rápido en sus piernas que en sus manos, controlaba bien la distancia acortándola para atacar o separándose para eludir los ataques. En el segundo asalto el combate de golpes rectos continuaría, ya que sobre estos puños basaban ambos el desarrollo del enfrentamiento, aunque en dicho round González llegaría de forma más clara y frecuente con su directo de derecha, siendo de todas formas contestado por el recto zurdo del aspirante.
En la distancia media se mantendría la pelea hasta que en el tercer round se produciría un breve intercambio en el cual Russell impactaría en corta un hook al cuerpo seguido por una combinación de ganchos al rostro, respondidos por el campeón con su potente gancho de izquierda al cuerpo. Cuando el episodio llegaba al final, González arremetía contra Russell recibiendo el campeón un hook de izquierda enlazado con un hook de derecha, ambos a la cabeza, que lo derribaban.
Dado que el round llegó a su fin enseguida Russell no pudo aprovechar la situación inmediatamente, pero el mexicano no se había recuperado de la caída entrado el combate en el cuarto asalto, por lo que con pocos segundos transcurridos una nueva combinación de ganchos al rostro derribaba a González. El campeón se levantaría con notables dificultades de esta segunda caída sólo para ser por tercera vez tumbado por nuevos e igualmente poderosos ganchos del aspirante, que dejaría de ser retador para convertirse en campeón, puesto que el árbitro detendría la pelea sin realizar cuenta.
De este modo y con un resultado tan inesperado el título WBC del peso pluma iba a parar a manos de Gary "Mr." Russell Jr. 26(15KO)-1, que en su segunda tentativa mundialista si conseguía hacerse con el cinturón. Su imagen fue muy diferente a la dada en su cruce con Vasyl Lomachenko, mostrándose mucho más rápido y fuerte a la vez que más preciso y efectivo, controlando con sus piernas la distancia y con ello el combate. En cambio González no ofreció ni de lejos su mejor versión: falto de agresividad y de determinación, a penas llegó con un par de ganchos de izquierda, su mejor arma, en lo que duró la pelea, cayendo finalmente en la trampa tendida por su oponente en el contragolpe.
Mucho se habla de que el excampeón mundial Mares se enfrentaría a finales de verano con el vencedor de este cruce, combate que probablemente tenga lugar si la WBC no exige otro desarrollo de los acontecimientos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario