Maritim Hotel, Magdeburgo, Alemania.
En juego el cinturón vacante de campeón de Europa del peso pesado.
En el arranque, Hubeaux mostraría un gran ritmo combativo, tanto que Kabayel, además de insistir una y otra vez con los golpes al cuerpo para disminuir su velocidad, apoyaría todo su peso encima de su rival, empujándolo hacia abajo para desgastarlo. Igualmente, en el primer tercio, el belga aprovecharía la persistente búsqueda de los golpes al torso por parte de Kabayel para contragolpearlo con fuertes hooks a la cabeza que impactaron claramente a través de la mala defensa del local. Así, y junto a un sólido jab y algún 1-2, Hubeaux iniciaría muy bien la pelea a la vez que su contrincante empezaba a dar algunos signos de cansancio, aunque pronto el encuentro llegaría a un punto de inflexión.
Alcanzado el cuarto asalto, los acumulados puños de Kabayel hacia la zona media de su adversario dieron evidentes resultados, padeciendo Hubeaux una clara perdida de intensidad combativa, evidenciando tanto que estaba cansado como que estaba un poco tocado. Por ello, Kabayel pudo presionar cada vez más y con mayor eficacia, impactando uppercuts y ganchos mientras los puños de su oponente perdían potencia progresivamente. En el séptimo round el visitante todavía trataría de reaccionar y presionaría con más fuerza y conectaría algunos directos, pero Kabayel volvería a tomar el control casi inmediatamente.
Desde el octavo asalto, el invicto Kabayel impondría algo más de ritmo a la pelea, conectando directos duros y claros uppercuts a los que su contrincante no podía dar respuesta equivalente. Finalmente, se limitaría a gestionar su ventaja con una considerable movilidad y con entradas y salidas, en las que conectó algunos buenos curvos encadenados. De esta forma, terminados los doce asaltos, los jueces le dieron la merecida victoria unánime a Agit Kabayel 16(12KO)-0, que se convertía en campeón de Europa del peso pesado a pesar de que ni mucho menos es el mejor boxeador de dicha categoría en todo el continente. Por otro lado, se debe decir que una de las cartulinas fue horriblemente localista, ya que con un 119-109 sólo dio un asalto a Hubeaux, algo realmente ridículo y fuera de toda lógica. En cualquier caso, las tarjetas de 117-111 y 117-112 dieron racionalidad al veredicto. La puntuación de Bastión Boxeo es de 116-112 a favor de Kabayel.
Aunque la división del peso pesado pasa por cierta crisis, Kabayel no parece ser un aspirante del nivel suficiente para encarar con garantías de éxito un mundial o un largo reinado. Y es que habiendo (sólo contando a los aspirantes mundiales de Europa) púgiles como Pulev, Chisora, Whyte, Hammer, Granat, Hughie Fury o Takam, entre otros, no parece que un Kabayel sin el adecuado estado de forma y con un boxeo un tanto limitado pueda escalar hasta lo más alto. Sea como sea, su triunfo fue meritorio, puesto que ante Hubeaux 26(12KO)-2, con evidentes cualidades y un gran manejo de las piernas, Kabayel supo arriesgar y aplicar un buen trabajo al cuerpo para poder controlar la pelea a medio término. Aun así, resta por saber si en su primera defensa del cinturón de Europa, Kabayel podrá estar a la altura, dado que en teoría su adversario será el aspirante mandatorio Mariusz Wach, boxeador veterano y que en sus peleas ante la élite no ha podido salir victorioso, pero que es muy alto, experimentado, tiene un gran encaje y por lo general usa bien los directos. Así, si termina materializándose este duelo, Kabayel se encontrará en una prueba de fuego para calibrar sus aspiraciones mundiales, mientras que Wach, que será favorito, afrontará una de las últimas oportunidades de su carrera para poder luchar por un campeonato.
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