El combate se inició con un asalto de tanteo en el que Salgado intentaba entrar con golpes rectos, que eran respondidos por potentes crochés y hooks a la contra de Cuadras. El "Príncipe" Cuadras, viendo que sus ataques conseguían llegar, optó por presionar con su 1-2, obligando al contraataque a Salgado, que utilizaba sus golpes curvos en croché y hook al cuerpo con poco acierto. Cuando la tónica del combate apuntaba hacia los duros intercambios de golpes, Cuadras propinó un terrible cabezazo, aparentemente involuntario, al atacar entrando agachado. El impacto produjo una brecha en la nariz de Salgado que temiendo que se parase el combate decidió atacar, consiguiendo llevar contra las cuerdas a Cuadras, quién empezó a pasar apuros por el uppercut y el hook de izquierda de su rival.
Cuando la pelea se estaba convirtiendo en una formidable batalla de rápidos ataques de Cuadras y fuertes golpes curvos de Salgado, un nuevo cabezazo del campeón abrió una considerable brecha en el párpado izquierdo del aspirante. El árbitro pidió el consejo del médico, quien decidió que Salgado no podía continuar. Por ello, como no se había sobrepasado el cuarto asalto y el corte era por cabezazo involuntario, se decretó el empate técnico.De este modo, Carlos Cuadras 30(24KO)-0-1 retiene su título mundial, aunque con malas sensaciones, pero no peores que las de Salgado 34(27KO)-2(1)-2, quien llegaba a este combate muy ilusionado por ser su primera oportunidad mundialista. Ambos se manifestaron, al finalizar el combate, partidarios de realizar una revancha, aunque esta puede tener que esperar por los compromisos contraídos previamente por Cuadras.
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