Metropolitan Gym, Tokio, Japón.
En juego el título mundial vacante WBC del peso minimosca.
Guevara, avanzando con su guardia bien cerrada, iniciaba el combate llegando en repetidas ocasiones con su derecha directa, golpe que sería su principal arma durante el combate junto al gancho de izquierdas. Por su parte, Yaegashi, que apoyaba mucho más su boxeo en las piernas, efectuaba ataques desde atrás con croché de mano izquierda y hook o directo de derechas. Estas ofensivas, en ocasiones un tanto precipitadas, del púgil japonés llevaron durante el segundo episodio a cerrados intercambios de golpes cuando ambos boxeadores se encontraban, cruces que dejaron además de golpes claros un corte en el parpado derecho de Guevara causado por un cabezazo involuntario.
Si bien se producirían más intercambios de golpes en la distancia corta durante el combate, la mayor parte del encuentro se desarrollaría en la distancia media/larga, en la que ambos se alternarían en la iniciativa y en las mejores acciones. Mientras que "Jibran" Guevara desarrollaba su táctica basada en el golpeo recto (favorecido por su mayor altura) y en los contragolpes, Yaegashi se apoyaba en su mayor velocidad para tratar de entrar y salir después de conectar combinaciones de golpes curvos con ambas manos. Aunque el boxeador japonés contaba con una mayor velocidad y precisión, el mexicano poseía una mayor potencia en su golpeo, algo que resultaría decisivo sobrepasado el ecuador de la contienda.
Con ambos mostrándose ya en el sexto episodio considerablemente desgastados por la disputada pugna, fue Yaegashi en el séptimo quien más acusó la dureza de la pelea, apoyándose por primera vez en las cuerdas, donde recibió una combinación de golpes directos y curvos de su contrincante. Tras estos, poco después recibía un hook de mano izquierda al hígado que le obligaba a poner la rodilla en la lona. Dado que Yaegashi no pudo responder a la cuenta del árbitro, Pedro "Jibran" Guevara 24(16KO)-1-1 se hacía con la victoria por knockout y con el título de campeón mundial WBC.
De esta manera el mexicano Guevara se hace por primera vez con un título absoluto, en un meritorio combate en el que desplegando un boxeo sólido y efectivo, aunque con poca variedad, pudo imponerse a un boxeador de la talla de Akira Yaegashi 20(10KO)-5(2), excampeón mundial en dos pesos diferentes. Del nuevo campeón destaca también su consistente uso del jab y del doble jab, que dificulta muchísimo (algo a lo que contribuye su gran envergadura) las entradas de sus oponentes, que se ven obligados a tomar más riesgos. Eso sí, se debe mencionar que el joven Guevara deberá mejor su aspecto defensivo, ya que recibió muchos golpes que podría haber evitado con una defensa más activa.
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