The Cosmopolitan of Las Vegas, Las Vegas, Estados Unidos.
En juego el título NABF del peso welter.
Pese a que ambos prospectos se jugaban no sólo la perdida de su record invicto sino también el alcance de grandes combates arrancaron con notable actividad. Zewski abriría las hostilidades con el hook de mano zurda al rostro, su mejor golpe durante la pelea, siendo respondido inicialmente por breves combinaciones de ganchos al cuerpo y posteriormente por contundentes combinaciones de rectos de Ponomarev. En base sobre todo a 1-2 o 1-2-hook zurdo, el boxeador ruso se haría pronto con el control del enfrentamiento, ya que ante estas ofensivas Zewski se mostraba falto de capacidad de contragolpeo, limitándose a cerrar herméticamente su guardia hasta que su oponente terminaba su serie. Ante esta carencia de respuesta por parte de su adversario, Ponomarev emprendía ataques con frecuencia después de los cuales salía del alcance rápidamente, demostrando un gran control de la distancia que se traducía en nuevas ofensivas cada vez que Zewski erraba un golpe, dudaba o daba un paso atrás.
Hay que mencionar que en el segundo asalto el boxeador canadiense Zewski visitaría la lona, pero el árbitro decidiría no realizar cuenta al estimar que había sido producida su caída por un golpe en la parte trasera de la cabeza. En cualquier caso los 1-2 y combinaciones jab-croché de derecha de Ponomarev llegaban con gran dureza, golpes que además de permitirle anotarse los tres primeros asaltos hicieron que Zewski tuviese que padecer una progresiva inflamación que dificultaba su visión. Ante esta situación de perdida de control de la pelea, Zewski pudo llevarse un par de asaltos hacía la mitad de la pugna, gracias principalmente a su notable pegada, que le permitió con unas pocas manos aisladas en directo y hook de mano adelantada desestabilizar ligeramente a su oponente.
De todas formas Ponomarev no se vería en ningún momento en apuros, sino que desplazándose lateralmente buscando los ángulos e insistiendo en sus combinaciones de golpes rectos terminaría por agrandar su control del combate. Y esto fue así también en gran parte por su magnífica percepción de los tiempos, que le permite atacar con gran efectividad en los intervalos de las ofensivas de su oponente o cuando este pierde ligeramente su tensión. Por ello a base de trabajo y de superior número de puños impactados era claro quien iba a ser declarado vencedor una vez que terminaron los diez asaltos del enfrentamiento.
Los tres jueces por decisión unánime y cartulinas de 99-91, 98-92 y 97-93 dieron el triunfo al joven Konstantin "Talant" Ponomarev 28(13KO)-0, que con una gran actuación, en la que pudo imponer su superior técnica y táctica, conservaba su invicto record y se veía alzado a los grandes combates. Con tan solo 22 años, pero con 28 victorias a sus espaldas, ha conseguido hacerse un hueco en la difícil división del peso welter, en la cual podría entrar en el top 10 WBC y en el top 15 WBO.
Dejando de lado su estelar ascenso, y que todavía ha logrado pocas victorias destacables, la gran pregunta es si podrá llegar mucho más arriba. Y esto no es una crítica a su calidad, sino una pregunta lógica en una categoría en la que tiene clasificados delante a Juan Manuel Márquez, Amir Khan, Shawn Porter, Marcos Maidana, Brandon Ríos, Robert Guerrero, Andre Berto, Devon Alexander y un largo etcétera de grandes púgiles. Esta pregunta es también realizable a muchos otros prospectos en esta división y en la inmediatamente posterior y superior. Sólo el tiempo nos dará la respuesta, pero es obvio que algunos de ellos deberán sumar amargas derrotas que les den la suficiente experiencia para poder llegar a ser un día campeones, aunque muchos otros no llegarán a serlo. En cualquier caso, y volviendo a Ponomarev, deberá su promotora escoger con mucho cuidado sus próximos rivales y continuar graduando la dificultad de sus pruebas si no quiere que su record imbatido llegue pronto a su fin.
No hay comentarios:
Publicar un comentario