Honda Center, Anaheim, Estados Unidos. Peso Supermedio.
La enorme diferencia de velocidad entre ambos contendientes al inicio del enfrentamiento fue el factor decisivo, algo que motivó que un dinámico Hernández pudiese realizar entradas y salidas conectando su directo, su gancho zurdo, su 1-2 o su 2-1, anotándose rounds uno tras otro, sin ser alcanzado por manos excesivamente potentes. Y es que "El Perro" Angulo erraba la mayoría de sus puños no por falta de precisión sino por insuficiente rapidez al lanzarlas. Así, Hernández pudo comenzar a encadenar curvos con cierta facilidad y conectar cruzados diestros abiertos enlazados con hooks zurdos, amenazando en el tercer asalto con desbordar a su inefectivo oponente.
Después de un punto crítico para Angulo en el cuarto asalto, en el que llegó a ser empujado contra las cuerdas, la reacción del en otro tiempo considerado púgil de la élite se produciría en el quinto round, tras ser alcanzado con combinaciones de ganchos sin respuesta. Aprovechando su mayor cualidad, su enorme pegada, Angulo conectaría un par de potentísimas derechas junto a algún hook diestro para alcanzar con gran dureza a su rival y cortarlo (por puño y no por cabezazo). Este buen asalto del extitular interino sería repetido en el siguiente episodio, en el que nuevamente su mano derecha abriría el corte de su rival e incluso le estremecería ligeramente.
De todas formas, con la excepción de un octavo round en el que Hernández pareció un tanto cansado y la pelea se trasladó a la distancia media-corta de forma prolongada ayudando a Angulo, el resto del encuentro sería igualmente dominado por "El Riel", que tirando de velocidad y ritmo combativo y lanzando un superior número de puños para no dejar duda en la puntuación, se anotaría los asaltos de la recta final. Tras unos pequeños apuros de Angulo en el décimo round que fueron compensados con valentía, el choque llegó a su conclusión, dando los jueces acertadas cartulinas de 97-93 doble y un 98-92 favorables a Freddy "El Riel" Hernández 34(22KO)-8(4), que capturaba uno de los mayores triunfos de su carrera por decisión unánime.
En principio el combate parecía planteado como una excelente oportunidad para que Alfredo Angulo 24(20KO)-6(3) alejase su crisis con su tercera victoria consecutiva, preparándose además para grandes retos en la división del peso medio. Pero el desarrollo y el resultado fueron muy diferentes de estas pretensiones, con Angulo dando una imagen bastante floja por su patente falta de velocidad y recursos, aspectos sólo compensados por su tenacidad y una pegada muy notable. Por ello, ahora mismo parece que las numerosas afirmaciones que señalaban que su carrera se encuentra en crisis se verán sumamente aumentadas, siendo innegable que necesita replantearse su carrera seriamente, teniendo que optar por un cambio drástico o por el retiro. En una situación diametralmente opuesta se encuentra Hernández, púgil más veterano que Angulo, que encadenaba su cuarto triunfo con una excelente actuación y que en los próximos meses debería verse alzado a una gran oportunidad por una buena bolsa. En cualquier caso, si se puede extraer una lectura del combate es que ninguno de los dos peleadores parecen estar ahora mismo capacitados para medirse con garantías de éxito a la élite de la división superwelter o media, porque Hernández vio su gran pelea facilitada por un oponente desdibujado por falta de velocidad.
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