@BastionBoxeo
MGM Grand, Las Vegas, Estados Unidos. Peso Pluma.
Con cuatro puntos restados a Yenifel Vicente 36(28KO)-5-2, dos knockdowns padecidos por éste, ataques desordenados y agarres, cruces de palabras entre los púgiles durante el tiempo de combate y, finalmente, una descalificación, el duelo que puso frente a frente la pasada noche al citado púgil dominicano y al excampeón mundial estadounidense Jessie Magdaleno 28(18KO)-1(1) resultó cuanto menos caótico. De todos modos, Magdaleno se hizo con el triunfo y mantiene vivas sus aspiraciones mundialistas a medio-corto plazo.
En el primer round Vicente, que siempre se sobreexpone al ataque, fue contragolpeado y derribado por un croché diestro de un Magdaleno contra las cuerdas. El puño no dejó en una situación crítica a Vicente, que se levantó y pudo seguir tomando el centro del ring. No obstante, poseer la iniciativa no le sirvió de nada, puesto que sostuvo una bajísima frecuencia de golpeo (hasta el 7º round Compubox le daba 25 golpes impactados) ante un Magdaleno que se desplazaba, jabeaba y conectaba algún tímido golpe de poder para llevarse los rounds.
Tras ciertos momentos de repunte ofensivo de Vicente, que fallaba muchas manos y estrellaba muchas otras contra la guardia de su adversario, en el cuarto round éste conectó un claro golpe ilegal que llevó al dolido Magdaleno a girarse. Entonces el árbitro Robert Byrd, que estuvo lento, pidió que parasen y trató de ponerse en medio para detener las acciones momentáneamente, pero Vicente, desoyéndolo, conectó un golpe a la cabeza de su rival, que se dejó caer al tapiz, donde estuvo unos minutos antes de que la pugna se reanudase.
Esta acción le costó a Vicente dos puntos, a los que se añadió otro descuento más en ese mismo cuarto episodio por un nuevo golpe bajo no tan potente como el anterior, siendo quizás el tercer hombre un poco riguroso de más aunque el púgil realizó una acción completamente absurda al volver a atacar tan abajo. Sea como sea, la situación todavía podía empeorar para el visitante, puesto que en el quinto round fue contragolpeado por un jab que le tiró a la lona, estando claro entonces que a los puntos ya no podía ganar la pelea de ninguna manera.
Desde el sexto round la tónica se mantuvo, con Magdaleno intentando responder o atacar entre intervalos, aunque sin poner mucho ritmo ofensivo a la pugna, y con Vicente atacando con potencia pero con desorden e imprecisión (también con irregularidades) cuando lograba brevemente encerrar a su rival. De todos modos, cuando la pugna parecía encaminada a una abrumadora victoria a los puntos de Magdaleno, en el décimo episodio Vicente volvió a dar un golpe bajo muy claro, perdiendo un cuarto punto, sanción que de nada serviría, dado que instantes más tarde propinó otro puño ilegal que llevó a su justificada descalificación.
Magdaleno afirmó tras el combate que su rival era sucio, algo que es difícil de cuestionar siendo tan recurrentes las ilegalidades cometidas por Vicente, si bien es justo afirmar que su precisión fue tan escasa durante la pelea que es posible que algunos de los golpes bajos fuesen fruto de la casualidad y no de la intencionalidad.
En cualquier caso, Vicente deja una mala imagen que podría costarle el acceso a nuevas oportunidades y que pondrá a la defensiva contra él, aunque sea subconscientemente, a los árbitros que en adelante se encuentre. Por lo que respecta a Magdaleno, entre tanta irregularidad es difícil extraer un veredicto sobre su actuación, pero parece claro que en el peso pluma sigue mostrando las mismas habilidades y defectos que en el peso supergallo: posee un boxeo dinámico eficaz que puede desarbolar las estrategias de rivales técnicos, pero bajo presión se refugia en las cuerdas en exceso, no sale de los encierros con suficiente soltura y los pegadores pueden lograr entonces resultados determinantes.
Victoria de López en buena batalla
Seguramente el mejor choque de la velada fue el que protagonizaron Adam López 14(6KO)-2(1) y Luis Coria 12(7KO)-3, pugna de alta intensidad y muchos golpes. En ella se impuso el favorito López por decisión mayoritaria (96-94 doble y 95-95) que perfectamente podría haber sido unánime, ya que su superioridad técnica marcó la diferencia.
Durante los dos primeros rounds el jovencísimo Coria salió a por todas, presionando de tal forma que llevó la pelea al intercambio en corta, escenario táctico en el que se llevó la mejor parte por su agresividad y cadencia con los golpes curvos. La situación era claramente desfavorable para López, pero éste reaccionó en el tercer episodio poniendo más espacio, lanzando el jab con enorme destreza, ofreciendo buenas esquivas dinámicas y estáticas y tirando de una gran elección de golpes, dejando detalles de gran calidad como una finta enlazada con un uppercut seguido a su vez por una salida lateral de la línea de ataque.
Estando claro tras la mitad que López estaba empezando a dominar el encuentro pese a las voluntariosas ofensivas de su rival, Coria tuvo momentos de amago de reacción en los que volvió a llegar con continuidad con sus hooks, pero su insistencia con los hooks mantuvo los huecos para los contragolpes rectos de su más experimentado oponente. Así, y sumándose cierto cansancio acumulado en el siempre ofensivo Coria, López pudo certificar un triunfo merecido que debería alzarle a un interesante combate para su carrera en la segunda mitad del año.
Empate cuestionable y triunfo rápido
Controvertido pudo resultar el veredicto de empate (doble 38-38 y 39-37) que los jueces otorgaron al duelo del peso ligero entre Eric Mondragón 3(2KO)-0-1 y Mike Danny Sánchez 6(2KO)-0-1, puesto que el primero pareció hacer méritos suficientes para hacerse con la victoria.
Con todo, no comenzaron bien para él las cosas, siendo derribado por un contragolpe ascendente de mano izquierda cuando trataba de atacar al comienzo del primer round. Esta caída la compensó, eso sí, muy poco después al cerrar una serie de curvos al cuerpo con un croché diestro que tumbó a Sánchez. Mondragón trató de explotar este knockdown en adelante portando la iniciativa y manteniendo un mayor volumen de golpes, algo que le permitió conectar más puños claros que su adversario, demasiado expectante y centrado en la respuesta.
Sin embargo, los jueces valoraron esta actividad como igualada con la respuesta del defensivo Sánchez, dando un empate final que no fue bien recibido por la esquina de un Mondragón que, pese a la caída inicial, mostró más que su contrincante por su capacidad de reacción ante la adversidad y su coraje bajo presión.
Finalmente, el choque más breve de la velada fue el protagonizado en el peso gallo por Gabriel Muratalla 3(3KO)-0 y Fernando Robles 2(0KO)-3(2), duelo que el primero resolvió, como sus anteriores dos pugnas, por knockout en el round inicial. Muratalla avanzó buscando golpes de poder con decisión pero con calma, hasta que, después de conectar algunos directos y un uppercut, impactó una derecha recta y un gancho zurdo que derribaron a Robles. Este se levantó, aunque desequilibrado, decidiendo el árbitro que no tenía sentido que siguiese combatiendo.
Muratalla, de 26 años, no debería tardar en medir las aguas a seis rounds, límite en el que, ante oponentes más competentes, se podrán evaluar mejor sus recursos.
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