Echo Arena, Liverpool, Reino Unido.
Campeonato mundial WBC del peso crucero. Primera defensa voluntaria del monarca Bellew.
El acierto de Flores en el primer asalto con sus directos, que impactó aislados y en 1-2, sólo le dio algo de emoción al combate para el público local, que quizás pudo pensar que la pelea podría ser más contendida de lo que sobre el papel parecía. Pero sólo hubo que esperar al segundo asalto para que, como se esperaba, Bellew se hiciese con el dominio del encuentro. Tras recibir y protestar Flores un golpe bajo que no fue visto por el incompetente Ian John Lewis, Bellew aprovecharía la situación para pasar al ataque. El retador haría un agarre poco tenso mientras se distraía mirando al árbitro, por lo que Bellew impactaría una combinación hook diesto-hook zurdo que tumbó a Flores.
En la reanudación, el británico llevaría hacia las cuerdas y buscaría la ofensiva final, pero sus continuados fallos con el directo y el gancho zurdo le permitirían resistir al "Peligroso", que incluso contragolpeó con un gancho diestro a la cabeza que dañó al local y terminó por ponerlo de espaldas al ensogado. Igualmente, Bellew lograría sacarse la presión y volver a tomar la iniciativa, impactando un directo enlazado con un hook zurdo de escasa potencia que derrumbó a Flores. Tras la segunda cuenta del árbitro se produjo un desesperado cruce de hooks en el que ambos se llegaron con potencia, pero finalmente sería "Bomber" quien conectaría un directo-hook zurdo-hook diestro para tirar por tercera vez a su rival.
Flores se puso en pie y llegó el final del segundo asalto, pero en el tercer round el choque llegaría a su desenlace. En el inicio el visitante pareció recuperado, conectando su 2-1 y otros rectos, pero Bellew impondría su derecha aislada hasta que lanzó una ofensiva en directo-hook que lo dejó muy cerca de su rival. Así, a la vez que Flores trataba de responder, Bellew lanzaría un gancho diestro abajo encadenado con un gancho de izquierda arriba que derribó por cuarta y definitiva vez a Flores. Decretado el KO Técnico por el árbitro, Bellew 28(18KO)-2(1)-1, a la vez que lo celebraba, se encararía con David Haye, amigo de BJ Flores con el que el campeón sostiene una intensa competencia y que se encontraba a pie de ring. La situación se tornó rocambolesca cuando Bellew saltó del cuadrilátero para situarse delante de Haye, aunque ambos fueron separados por la seguridad del estadio.
Terminado el incidente, no se olvidaría Bellew del excampeón Haye, al que, a través de la entrevista posterior al combate, retaría de forma muy vehemente. De este modo se asentaban todavía más las bases de una posible pelea entre ambos, duelo que se lleva rumoreando y preparando desde hace mucho tiempo y que podría tener lugar si es que Bellew se impone a sus mandatorios. Y es que será muy difícil que el Consejo permita una defensa voluntaria más antes de que el campeón afronte, ya tardíamente, sus dos retos obligatorios: la primera defensa mandatoria ante uno de los tres mejores retadores crucero de la actualidad, Mairis Briedis, y el choque ante el titular en receso Grigory Drozd. Sea como sea, y dejando de lado el hecho de que parece que será muy difícil que Bellew pueda mantenerse como campeón enfrentando a Briedis, Drozd o Haye (mucho menos midiéndose a los tres), el combate ante Flores 32(20KO)-3(1)-1 fue, como se preveía, cómodamente resuelto. Simplemente Flores, tal y como se vio ante un esperpéntico Shumenov, no tiene el nivel de un top 15. Con todo, no se puede pasar por alto que el retador tuvo acierto parcial (mostrando nuevamente la mala defensa de Bellew) y que en el primer knockdown, si bien Flores cometió el error de descuidarse, nuevamente el tercer hombre Ian John Lewis realizó un fallo decisivo al no haber separado a ambos y haber dado un descanso de recuperación cuando se produjo el claro golpe bajo que rompió el combate.
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