El único mundial masculino de esta jornada es el WBC del peso crucero que disputarán Mairis Briedis y Mike Pérez, encuentro que será parte del torneo World Boxing Super Series y que llevará a su ganador a la semifinal ante el monarca WBO Oleksandr Usyk.
Podéis leer la previa del mundial Briedis-Pérez en este link a Espabox
En este evento, que tendrá lugar en el Arena Riga de Letonia, se producirán algunas peleas de respaldo de cierto interés, sobresaliendo entre ellas la que enfrentará al exmonarca mundial del peso crucero Krzysztof Glowacki 27(17KO)-1 y a Leonardo Damián Bruzzese 18(6KO)-3(2) y el debut del peso pesado, olímpico por Croacia, Filip Hrgovic 0(0KO)-0 ante Ali Baghhouz 10(6KO)-0-1.
De todos modos, aunque el Briedis-Perez será el único campeonato masculino, este sábado se producirán dos mundiales femeninos, destacando la final del torneo WBC del peso mosca entre Jéssica “Kika” Chávez 29(4KO)-4-3 y Esmeralda Moreno 35(11KO)-9-1, enfrentamiento en el que, para muchos, se verán las caras las dos mejores boxeadoras de las divisiones mosca y minimosca de la actualidad. Además, ambas púgiles pasan por un momento excepcional, tienen un boxeo bastante técnico y ya se vieron las caras dos veces con anterioridad, por lo que este duelo cerrará una formidable trilogía. Dado que Chávez lleva casi tres años sin ser derrotada y se ha impuesto recientemente a púgiles como Galassi, Taborda, Fujioka y a la misma Moreno, será favorita para conseguir el triunfo. En cualquier caso, Moreno consiguió un triunfo en su última subida al ring ante la imparable Ibeth Zamora que hace que este choque sea igualmente sumamente abierto.
En el respaldo de esta velada, que tendrá como sede el Centro Regional de Arte, Cultura y Deporte “Las Américas” de Ecatepec, México, y será retransmitido por Televisa, un Edgar Jiménez 22(16KO)-13(8)-2 estancado y un Felipe Orucuta 34(28KO)-4(1) en clara progresión combatirán en el peso gallo en una pugna excelentemente emparejada y con importantes repercusiones para el vencedor.
Por otro lado, en el Arena Oasis de Cancún, México, y con retransmisión de Tv Azteca y beIN Sports, se producirá el mundial femenino WBC del peso supermosca entre la titular Guadalupe Martínez 15(9KO)-9 y la retadora Carlota Santos 7(5KO)-4(1)-5. Este campeonato, con todo, está aparentemente muy decantado del lado de la mexicana Martínez, que llegará a esta pugna tras vencer claramente a la fantástica Zulina Muñoz y que se medirá a una rival modesta, con poca experiencia de calidad y ninguna victoria insigne, de modo que el triunfo de la campeona parece el resultado inevitable. Quizás, pueda ser una pugna plenamente superior la que enfrentará en este mismo cartel, pero sin título en juego, a las exmonarcas Arely Muciño 24(10KO)-3(1)-2 y Tenkai Tsunami 23(12KO)-11, combate entre velocidad y tenacidad y una revancha de un nivelado duelo disputado por ambas en 2014 que debería resultar mucho más contendido que el mundial con el que compartirá evento.
Finalmente, en cuanto a boxeo femenino se refiere, se debe mencionar un sensacional campeonato de Europa del peso ligero entre la ucraniana Oleksandra Sidorenko 6(1KO)-0 y la francesa Isabelle Pare 6(1KO)-0, duelo entre imbatidas y prometedoras boxeadoras de idéntico récord que impulsará a la vencedora hacia la élite mundial de la categoría. El Sidorenko-Pare, que se producirá en Lomianki, Polonia, y será televisado por PolSat Sport, será acompañado por un interesante combate del peso semipesado entre el enrachado Robert Parzeczewski 16(9KO)-1 y el fogueado Tomas Adamek 26(9KO)-14(4)-2, prueba de fuego para la proyección del primero.
Centrándonos de nuevo en el pugilismo masculino, en esta jornada se producirán también muy buenas peleas, que serán además trascendentales para el devenir de diversas divisiones.
Especial atención merece el campeonato de Europa del peso superligero que será disputado por el titular Anthony Yigit 19(7KO)-0-1 y por el aspirante Sandor Martín 29(10KO)-1, que combatirán en una pelea que podría dejar al vencedor cerca del mundial. Hay que señalar que Yigit es 6º WBA e IBF y 16º WBC, ranking en el que Martín es 18º, por lo que la victoria del sueco podría lanzarle a la eliminatoria de la Federación y la del español le dispararía hacia el top 10 mundial. Por otro lado, sobre el ring, el combate resulta de lo más interesante, dado que ambos son dos boxeadores hábiles, con buena técnica y recursos, cuyos estilos tienen algunas similitudes, de modo que a priori debería ser un choque igualado y con una importantísima carga táctica. El favorito de las apuestas será Yigit, aunque éste ha mostrado claras brechas ante rivales jóvenes y con proyección como Schwarzkopf y Philip Sutcliffe Jnr., por lo que para nada se deben descartar las posibilidades de un Martín que puede resultar muy correoso cuando opta por estrategias conservadoras. El combate se producirá en el Solnhallen de Solna, Suecia, y será televisado para España por GOL.
Además de la corona continental del peso superligero, también se pondrá en juego este sábado el cinturón EBU del peso supegallo, en el que Abigail Medina 17(8KO)-3(1)-2 tratará de defender su título en el Borough Hall de Hartlepool, Reino Unido, ante el exretador mundial Martin Ward 25(3KO)-3(2)-1. De nuevo, esta pelea parece posiblemente muy contendida y el favorito no lo será por amplio margen. Y es que Medina logró en su última pelea una estupenda victoria ante un boxeador tan duro como Jeremi Parodi, mientras que Ward es un púgil sólido, con más experiencia y que en los últimos tres años y medio sólo ha sumado una ajustada derrota. Aun así, Medina debería ser contado, a pesar de su condición de visitante, como favorito, ya que cuenta con superior pegada, mejor bagaje de calidad y pasa por una gran racha, todo ello a la vez que Ward recientemente a penas se ha medido a oposición de calidad. Así el campeón parece capacitado para retener su cinto, aunque la pelea podría embarrarse, favoreciendo los intereses del local.
En cualquier caso, muchas de las miradas de esta jornada estarán fijadas en la velada que Matchroom Boxing organizará en el Echo Arena de Liverpool, Reino Unido, y que será televisada por SKY, donde el top 15 del peso supermedio en cuatro organismos Rocky Fielding 24(13KO)-1(1) combatirá contra el 2º clasificado WBO David Brophy 19(13KO)-1(1)-1 por situarse al alcance del mundial que posee Gilberto Ramírez. Dado que Brophy consiguió su gran posicionamiento con una inesperada victoria ante Zac Dunn, pero no posee otras victorias destacables, parece que un Fielding con varios triunfos ante adversarios de nivel alto debería hacerse con el triunfo. En cualquier caso, Brophy ha demostrado que no se le puede subestimar un ápice y Fielding ha sufrido de forma inesperada para vencer a rivales como Rebrasse o John Ryder, de modo que el cruce podría ser bastante más abierto de lo que se puede prever.
En el respaldo, Paul Butler 24(13KO)-1(1) y Stuart Hall 21(7KO)-5-2 pelearán en una eliminatoria final WBA del peso gallo para convertirse en el retador obligatorio de Zhanat Zhakiyanov y Tom Farrell 13(3KO)-0 y Ohara Davies 15(12KO)-1(1) pugnarán por un cetro menor de la Asociación que dé el acceso al ganador al top 15 del peso superligero.
Finalmente, se debe hacer mención de diversos escenarios más en los que se producirán algunas interesantes peleas:
- En Bélgica, Sasha Yengoyan 40(25KO)-2-1 y Howard Cospolite 15(6KO)-6(1)-2 pugnarán por el título IBF Internacional del peso superwélter y por tratar de acceder al top 15 de dicho organismo.
- En Estados Unidos, televisado por ESPN, el peso medio Gary O’Sullivan 25(17KO)-2(1) intentará ensanchar su racha de triunfos ante Nick Quigley 15(3KO)-2(1) y el peso superpluma Dardan Zenunaj 13(10KO)-0 buscará afianzar su recuperación venciendo a Recky Dulay 10(7KO)-2(1).
- En Alemania, el peso semipesado Adam Deines 12(7KO)-0-1 afrontará un test de notable dureza ante Germán Rafael 13(9KO)-1.
- En Italia se producirán dos campeonatos nacionales que enfrentarán, en el peso superligero, a Luciano Randazzo 10(0KO)-2-3 y Francesco Lomasto 11(0KO)-1 y, en el peso pluma, a Nicola Cipolletta 13(3KO)-5(1)-2 y Mauro Forte 6(1KO)-0-1.
- También en Estados Unidos, con retransmisión de TyC Sports, Juan José Velasco 16(9KO)-0 tratará de acceder a la parte baja del ranking WBC del peso superligero venciendo al asequible pero resistente Juan García Méndez 19(12KO)-2-2.
sábado, 30 de septiembre de 2017
viernes, 29 de septiembre de 2017
Los mejores combates de este viernes (29/9/2017)
Quizás, este fin de semana será, comparativamente hablado, menos interesante que los que se producirán durante un formidable octubre, en el que tendrán lugar jornadas con hasta seis mundiales. De todos modos, entre el viernes y el sábado habrá un puñado de buenos duelos que alejan a esta semana respecto a las jornadas menos concurridas de la temporada.
Centrándonos en el viernes, el evento más interesante de hoy será el que se disputará en La Casilla de Bilbao, España, donde se verán las caras el prometedor boxeador local Jon Fernández 13(11KO)-0 y el imbatido ruso Alexander Podolsky 9(3KO)-0. Fernández no sólo debe de ser visto como la principal figura en ascenso del pugilisimo español sino como uno de los boxeadores con más proyección a nivel mundial en la división del peso superpluma, por lo que vale la pena estar muy atento a sus combates y a su progreso, más aún cuando en esta pelea podría hacerse con el título Plata WBC, que debería darle acceso al top 15 de dicho organismo. Con todo, antes de ello deberá superar a un rival competente como Podolsky, que es plenamente consciente de que simplemente el hecho de lucir bien ante Fernández ya le serviría para alzarse a próximas peleas importantes. En cualquier caso, Fernández tendrá a su favor ventaja en experiencia, en altura, en habilidad técnica y, sobre todo, en potencia de golpeo, de modo que su victoria es el resultado previsible, no siendo para nada descartable el triunfo antes del límite.
En el mismo evento se producirán algunas peleas destacables, principalmente la que disputarán, también por el cinturón WBC Plata pero de la modalidad femenina y del peso superwélter, la sueca Maria Lindberg 15(8KO)-2-2 e Inna Sagaydakovskaya 5(2KO)-0. Este enfrentamiento a priori resulta muy interesante, ya que una prospecta imbatida con ciertas cualidades se enfrentará a una boxeadora mucho más desarrollada y fogueada pero que se ha medido a muchas rivales modestísimas y que ha caído derrotada cada vez que ha medido a una oponente de nivel (eso sí, ambas veces ante la excelente Christina Hammer), por lo que será un buen duelo para clarificar qué lugar le corresponde en la división a cada boxeadora, todo ello quedando la ganadora a un paso del mundial que posee Ewa Piatkowska.
También en la velada, Carlos Pérez 10(2KO)-5 se medirá en el peso superligero al ruso He Su Khan 5(1KO)-1 y Carlos Ramos 6(5KO)-0 se enfrentará en el peso supergallo al nicaragüense Arnoldo Solano 14(0KO)-12(2), siendo los locales Pérez y Ramos evidentes favoritos.
Además de este interesante evento, se deben destacar cuatro veladas más repartidas entre dos regiones distintas del planeta, respectivamente Asia y América:
- En Japón, el exretador mundial, que derribó a Guillermo Rigondeaux, Hisashi Amagasa 33(21KO)-6(1)-2 buscará su reingreso en el top 15 del peso pluma haciéndose con un título menor WBO superando al durísimo filipino Richard Pumicpic 19(6KO)-8-2, combate que estará acompañado por un duelo de peso supergallo excelentemente emparejado entre los locales Takafumi Nakajima 28(12KO)-9(3)-1 y Jin Miura 9(1KO)-2(1).
- En China, el olímpico filipino Mark Anthony Barriga 6(1KO)-0 tratará de dar un salto decisivo en sus aspiraciones mundialistas en el peso mínimo derrotando al doble retador mundial Wittawas Basapean 33(12KO)-6(3), enfrentamiento que será respaldado por un interesante choque en el peso mosca entre el también filipino Ronnie Baldonado 9(6KO)-0-1 y el indonesio Iwan Zoda 14(13KO)-2(1)-1.
- Pasando a Estados Unidos, se debe destacar la velada que se producirá en Philadelphia y que contará con adecuadas peleas de desarrollo para diversos prospectos, entre las cuales destacan, el enfrentamiento en el peso gallo entre los pegadores Christian Carto 11(11KO)-0 y Alonso Meléndez 14(12KO)-1; el cruce entre el espigadísimo peso superligero Mykal Fox 14(4KO)-0 y el ecuatoriano Marlon Aguas 9(6KO)-1(1); y el combate entre los peso ligero Carlos Rosario 7(4KO)-2(1) y Jerome Conquest 8(1KO)-2, que combatirán en una igualada pelea que resultará crucial para el devenir de sus trayectorias.
-Finalmente, desde Dallas se televisará por beIN Sports un evento estelarizado por el combate entre el top 15 del peso superwélter John Vera 17(10KO)-0 y el modestísimo nigeriano Sunday Ajuwa 13(10KO)-2(1), aunque la atención debería centrarse en el debut profesional del excelente peso pesado Ivan Dychko 0(0KO)-0, doble bronce olímpico y doble plata mundial amateur que iniciará su andadura midiéndose a Abur Wright 2(1KO)-1(1).
Centrándonos en el viernes, el evento más interesante de hoy será el que se disputará en La Casilla de Bilbao, España, donde se verán las caras el prometedor boxeador local Jon Fernández 13(11KO)-0 y el imbatido ruso Alexander Podolsky 9(3KO)-0. Fernández no sólo debe de ser visto como la principal figura en ascenso del pugilisimo español sino como uno de los boxeadores con más proyección a nivel mundial en la división del peso superpluma, por lo que vale la pena estar muy atento a sus combates y a su progreso, más aún cuando en esta pelea podría hacerse con el título Plata WBC, que debería darle acceso al top 15 de dicho organismo. Con todo, antes de ello deberá superar a un rival competente como Podolsky, que es plenamente consciente de que simplemente el hecho de lucir bien ante Fernández ya le serviría para alzarse a próximas peleas importantes. En cualquier caso, Fernández tendrá a su favor ventaja en experiencia, en altura, en habilidad técnica y, sobre todo, en potencia de golpeo, de modo que su victoria es el resultado previsible, no siendo para nada descartable el triunfo antes del límite.
En el mismo evento se producirán algunas peleas destacables, principalmente la que disputarán, también por el cinturón WBC Plata pero de la modalidad femenina y del peso superwélter, la sueca Maria Lindberg 15(8KO)-2-2 e Inna Sagaydakovskaya 5(2KO)-0. Este enfrentamiento a priori resulta muy interesante, ya que una prospecta imbatida con ciertas cualidades se enfrentará a una boxeadora mucho más desarrollada y fogueada pero que se ha medido a muchas rivales modestísimas y que ha caído derrotada cada vez que ha medido a una oponente de nivel (eso sí, ambas veces ante la excelente Christina Hammer), por lo que será un buen duelo para clarificar qué lugar le corresponde en la división a cada boxeadora, todo ello quedando la ganadora a un paso del mundial que posee Ewa Piatkowska.
También en la velada, Carlos Pérez 10(2KO)-5 se medirá en el peso superligero al ruso He Su Khan 5(1KO)-1 y Carlos Ramos 6(5KO)-0 se enfrentará en el peso supergallo al nicaragüense Arnoldo Solano 14(0KO)-12(2), siendo los locales Pérez y Ramos evidentes favoritos.
Además de este interesante evento, se deben destacar cuatro veladas más repartidas entre dos regiones distintas del planeta, respectivamente Asia y América:
- En Japón, el exretador mundial, que derribó a Guillermo Rigondeaux, Hisashi Amagasa 33(21KO)-6(1)-2 buscará su reingreso en el top 15 del peso pluma haciéndose con un título menor WBO superando al durísimo filipino Richard Pumicpic 19(6KO)-8-2, combate que estará acompañado por un duelo de peso supergallo excelentemente emparejado entre los locales Takafumi Nakajima 28(12KO)-9(3)-1 y Jin Miura 9(1KO)-2(1).
- En China, el olímpico filipino Mark Anthony Barriga 6(1KO)-0 tratará de dar un salto decisivo en sus aspiraciones mundialistas en el peso mínimo derrotando al doble retador mundial Wittawas Basapean 33(12KO)-6(3), enfrentamiento que será respaldado por un interesante choque en el peso mosca entre el también filipino Ronnie Baldonado 9(6KO)-0-1 y el indonesio Iwan Zoda 14(13KO)-2(1)-1.
- Pasando a Estados Unidos, se debe destacar la velada que se producirá en Philadelphia y que contará con adecuadas peleas de desarrollo para diversos prospectos, entre las cuales destacan, el enfrentamiento en el peso gallo entre los pegadores Christian Carto 11(11KO)-0 y Alonso Meléndez 14(12KO)-1; el cruce entre el espigadísimo peso superligero Mykal Fox 14(4KO)-0 y el ecuatoriano Marlon Aguas 9(6KO)-1(1); y el combate entre los peso ligero Carlos Rosario 7(4KO)-2(1) y Jerome Conquest 8(1KO)-2, que combatirán en una igualada pelea que resultará crucial para el devenir de sus trayectorias.
-Finalmente, desde Dallas se televisará por beIN Sports un evento estelarizado por el combate entre el top 15 del peso superwélter John Vera 17(10KO)-0 y el modestísimo nigeriano Sunday Ajuwa 13(10KO)-2(1), aunque la atención debería centrarse en el debut profesional del excelente peso pesado Ivan Dychko 0(0KO)-0, doble bronce olímpico y doble plata mundial amateur que iniciará su andadura midiéndose a Abur Wright 2(1KO)-1(1).
miércoles, 27 de septiembre de 2017
Jorge Linares – Luke Campbell (23/9/2017)
Forum, Inglewood, Estados Unidos.
Campeonato mundial WBA del peso ligero. Segunda puesta en juego del titular Linares y primera defensa obligatoria de su reinado.
El elemento decisivo del enfrentamiento se situó en el comienzo de la pugna, ya que, siendo ambos dos boxeadores técnicos y astutos, Linares acertó plenamente al acelerar las acciones muy temprano. Así, mientras Cambpell trataba de encontrar su distancia y su ritmo con su jab, Linares tiraría su uno-dos y otros golpes de poder que le metieron en la pugna muy pronto y dificultaron el despliegue del británico, que se mostró algo confundido. Tanto fue así que en el segundo asalto el monarca conectó una derecha recta que derribó al retador.
El oro olímpico Cambpell se recuperó pronto del golpe, pero no tácticamente. Al contrario, el venezolano se mostraría dominador durante los siguientes dos rounds con precisas entradas y salidas en las que tiraba combinaciones e impactaba varias veces un fantástico uppercut, que incluso impresionó a los comentaristas británicos. Aun así, Campbell, que inmediatamente después del knockdown erraba muchos golpes, empezó a reaccionar poco a poco, y desde el cuarto round llegó bien con hooks al torso y con otros golpes.
Finalmente, desde el quinto episodio Campbell asentó su reacción, siendo clave en ella su acierto al contragolpe en respuesta a los directos de su adversario. Una vez que consiguió evitar que Linares tuviese la iniciativa constante, el británico empezó a boxear con mucha más comodidad, impactando bien su gancho diestro o enlazado con el directo de mano adelantada, hooks al torso y el uno-dos, todo ello a la vez que conseguía bloquear las manos del monarca. “El Niño de Oro” Linares había perdido el impulso y estaba, a pesar de que el choque se desarrollaba todavía contendido e igualado, en una posición en las cartulinas cada vez más crítica, que se traducía en una precipitación ofensiva que favorecía las buenas acciones defensivas de Cambpell.
Con todo, sumado a su buen inicio del encuentro, en el que capturó los cuatro primeros rounds y con un knockdown, para Jorge Linares 43(27KO)-3(3) llegó un repunte de la actividad en los dos últimos episodios, asaltos igualados pero en los que pareció hacer lo suficiente para certificar el triunfo por el mínimo margen. Efectivamente, llegada la pelea a la lectura de cartulinas los jueces le otorgaron la victoria por decisión dividida y puntuaciones de 114-113, 113-115 y 115-112. Primeramente, lo que se debe destacar es que Luke Campbell 17(14KO)-2 ofreció, ante quien es considerado el número 1 de la división, una actuación fenomenal, en la cual, a pesar de que tenía sobre sus hombros el reciente fallecimiento de su padre y tuvo que soportar un knockdown, consiguió reordenar su boxeo y quedarse a un solo paso de hacerse con el cinturón mundial. Después de la inesperada derrota ante Yvan Mendy, muchos descartaron sus posibilidades de convertirse en titular pero en su primer campeonato supo estar más que a la altura y demostrar su talla técnica, su inteligencia combativa y sus recursos.
Ante un boxeador tan sumamente complicado, Linares, igualmente, aunque por un margen mínimo, logró hacerse con la victoria, aprovechando para ello su experiencia para alcanzar un temprano punto de inflexión en la contienda que terminó por decidirla. Ciertamente, tras ganar por un margen tan estrecho, se producirán injustificadas críticas contra Linares, principalmente señalando que en el posible enfrentamiento que podría sostener ante Mikey García no podría volver a mostrar esta irregularidad combativa y esta pérdida de control de la acciones. Con todo, hay que recordar que en su última pelea García, ante Broner, se mostró mucho más lento y menos explosivo y que, si bien se impuso convincentemente, no tuvo un buen final, por lo que de cara al probable choque entre ambos que debería producirse en el inicio del próximo año todo sigue igual, pareciendo que Linares y García deberían ofrecer una pelea muy igualada e interesantísima.
Campeonato mundial WBA del peso ligero. Segunda puesta en juego del titular Linares y primera defensa obligatoria de su reinado.
El elemento decisivo del enfrentamiento se situó en el comienzo de la pugna, ya que, siendo ambos dos boxeadores técnicos y astutos, Linares acertó plenamente al acelerar las acciones muy temprano. Así, mientras Cambpell trataba de encontrar su distancia y su ritmo con su jab, Linares tiraría su uno-dos y otros golpes de poder que le metieron en la pugna muy pronto y dificultaron el despliegue del británico, que se mostró algo confundido. Tanto fue así que en el segundo asalto el monarca conectó una derecha recta que derribó al retador.
El oro olímpico Cambpell se recuperó pronto del golpe, pero no tácticamente. Al contrario, el venezolano se mostraría dominador durante los siguientes dos rounds con precisas entradas y salidas en las que tiraba combinaciones e impactaba varias veces un fantástico uppercut, que incluso impresionó a los comentaristas británicos. Aun así, Campbell, que inmediatamente después del knockdown erraba muchos golpes, empezó a reaccionar poco a poco, y desde el cuarto round llegó bien con hooks al torso y con otros golpes.
Finalmente, desde el quinto episodio Campbell asentó su reacción, siendo clave en ella su acierto al contragolpe en respuesta a los directos de su adversario. Una vez que consiguió evitar que Linares tuviese la iniciativa constante, el británico empezó a boxear con mucha más comodidad, impactando bien su gancho diestro o enlazado con el directo de mano adelantada, hooks al torso y el uno-dos, todo ello a la vez que conseguía bloquear las manos del monarca. “El Niño de Oro” Linares había perdido el impulso y estaba, a pesar de que el choque se desarrollaba todavía contendido e igualado, en una posición en las cartulinas cada vez más crítica, que se traducía en una precipitación ofensiva que favorecía las buenas acciones defensivas de Cambpell.
Con todo, sumado a su buen inicio del encuentro, en el que capturó los cuatro primeros rounds y con un knockdown, para Jorge Linares 43(27KO)-3(3) llegó un repunte de la actividad en los dos últimos episodios, asaltos igualados pero en los que pareció hacer lo suficiente para certificar el triunfo por el mínimo margen. Efectivamente, llegada la pelea a la lectura de cartulinas los jueces le otorgaron la victoria por decisión dividida y puntuaciones de 114-113, 113-115 y 115-112. Primeramente, lo que se debe destacar es que Luke Campbell 17(14KO)-2 ofreció, ante quien es considerado el número 1 de la división, una actuación fenomenal, en la cual, a pesar de que tenía sobre sus hombros el reciente fallecimiento de su padre y tuvo que soportar un knockdown, consiguió reordenar su boxeo y quedarse a un solo paso de hacerse con el cinturón mundial. Después de la inesperada derrota ante Yvan Mendy, muchos descartaron sus posibilidades de convertirse en titular pero en su primer campeonato supo estar más que a la altura y demostrar su talla técnica, su inteligencia combativa y sus recursos.
Ante un boxeador tan sumamente complicado, Linares, igualmente, aunque por un margen mínimo, logró hacerse con la victoria, aprovechando para ello su experiencia para alcanzar un temprano punto de inflexión en la contienda que terminó por decidirla. Ciertamente, tras ganar por un margen tan estrecho, se producirán injustificadas críticas contra Linares, principalmente señalando que en el posible enfrentamiento que podría sostener ante Mikey García no podría volver a mostrar esta irregularidad combativa y esta pérdida de control de la acciones. Con todo, hay que recordar que en su última pelea García, ante Broner, se mostró mucho más lento y menos explosivo y que, si bien se impuso convincentemente, no tuvo un buen final, por lo que de cara al probable choque entre ambos que debería producirse en el inicio del próximo año todo sigue igual, pareciendo que Linares y García deberían ofrecer una pelea muy igualada e interesantísima.
Resultados: Leduan Barthelemy y Eduardo Ramírez empataron
Ayer, en el Cannery Casino & Hotel de Las Vegas, Estados Unidos, se produjo una velada retransmitida por FOX Sports estelarizada por un excelente combate del peso pluma entre Leduan Barthelemy 13(7KO)-0-1 (hermano del excampeón Rances Barthelemy) y el invicto mexicano Eduardo Ramírez 20(7KO)-0-3, que catapultó su carrera derrotando al imbatido top 15 Edivaldo Ortega. Pues bien, aunque el choque debería haber supuesto para el vencedor un posible acceso al top 10 mundial, ninguno de los dos pudo lograr el triunfo, terminando el encuentro en un empate por decisión dividida con cartulinas de 96-94, 93-97 y 95-95.
Así, las trayectorias de ambos permanecerán hasta cierto punto en la misma posición en que se encontraban antes de este duelo, aunque como resultó una pelea entretenida y los dos desean una revancha, quizás Barthelemy y Ramírez puedan verse las caras en un enfrentamiento de desquite decisivo. De todos modos, quien sale más favorecido del combate es Barthelemy, que estaba sin poner a prueba ante rivales de nivel alto y que logró mantenerse en pugna ante el complicadísimo Ramírez, que, eso sí, no se mostró nada de acuerdo con el veredicto.
En el respaldo del evento, el prospecto del peso superpluma Alejandro Salinas 9(8KO)-1 venció al correoso Duarn Vue 12(4KO)-1-2 por decisión unánime y cartulinas de 80-72, 79-73 y 77-75, triunfo muy importante para sus intereses, que afianzará la confianza de su promotor en él y que debería garantizarle recibir buenas peleas de desarrollo.
Así, las trayectorias de ambos permanecerán hasta cierto punto en la misma posición en que se encontraban antes de este duelo, aunque como resultó una pelea entretenida y los dos desean una revancha, quizás Barthelemy y Ramírez puedan verse las caras en un enfrentamiento de desquite decisivo. De todos modos, quien sale más favorecido del combate es Barthelemy, que estaba sin poner a prueba ante rivales de nivel alto y que logró mantenerse en pugna ante el complicadísimo Ramírez, que, eso sí, no se mostró nada de acuerdo con el veredicto.
En el respaldo del evento, el prospecto del peso superpluma Alejandro Salinas 9(8KO)-1 venció al correoso Duarn Vue 12(4KO)-1-2 por decisión unánime y cartulinas de 80-72, 79-73 y 77-75, triunfo muy importante para sus intereses, que afianzará la confianza de su promotor en él y que debería garantizarle recibir buenas peleas de desarrollo.
martes, 26 de septiembre de 2017
Parker-Fury, una polémica más con un claro beneficiado
En un choque que no estuvo a la talla de lo que se espera de un campeonato mundial del peso pesado, el monarca WBO de la división máxima Joseph Parker conservó su cinturón derrotando a su retador oficial Hughie Fury con una decisión mayoritaria que ha levantado una notable polémica. Y es que Fury no anotó golpes de poder en suficiente número y Parker erró una cantidad incontable de puños, haciendo que las lecturas del choque hayan sido de lo más variadas. En cualquier caso, los jueces dieron cartulinas de doble 118-110 y 114-114, que sirvieron al neozelandés para poder seguir apuntando a combates ante la élite de la división, a la que no parece que pueda batir.
La contienda tuvo un desarrollo monótono, con Parker persiguiendo constantemente a un Fury que se desplazaba cercano a las cuerdas tirando su jab. Hay que subrayar que ninguno de los dos boxeadores hizo incontestable su primacía, puesto que la presión de Parker resultaba irregular e ineficaz, no logrando alcanzar la distancia corta más que en desordenadas embestidas, y Fury ni siquiera contaba con precisión o contundencia en su jab, prácticamente el único golpe que lanzaba, por lo que hubo diversos asaltos que tuvieron muy poco que destacar en cuanto a acciones ofensivas efectivas.
En el ámbito contrario, en acierto defensivo, Hughie Fury sí ofreció una actuación abrumadoramente superior, dado que hubo varios rounds en los que Parker no acertó ni una sola mano, llegando a lanzar series de media decena de golpes de los que no estaba cerca de anotar ninguno de ellos. Para evitarlos, Fury no sólo tiraba de movilidad, sino que se dejaba caer sobre las cuerdas para quedar fuera del alcance del visitante, al que también esquivó, con leves giros de cintura u hombros, y bloqueó.
Ciertamente, los ataques de Parker eran tan previsibles, precipitados y desordenados que Fury no tuvo problemas para evitar casi la totalidad de ellos. Además, cuando el campeón logró permanecer en la distancia corta, el local recurría a un clinch que fue la última arma utilizada para neutralizar al neozelandés. Por otro lado, no hay que olvidar que entre todas las ofensivas erradas por parte de Parker, y a pesar de que Fury se centró demasiado en un jab flojísimo, en ocasiones el retador conectó claros contragolpes en uppercut, hook o incluso directo.
La excepción a esta tónica, en la que Parker también tuvo largos periodos de inactividad, llegó en los últimos rounds cuando el campeón sí que consiguió anotar algunas manos claras, como un par de derechas en el último episodio. Con todo, esto no sirvió para modificar la percepción de que su actuación fue nefasta.
Dicho esto, que dos jueces otorgasen todos los asaltos menos dos a Parker es, una semana más, una atroz ignominia y un claro signo de corrupción. Y es que otorgarle diez asaltos a Parker significa que se le dieron rounds en los que no acertó ni un sólo golpe, cosa que resulta a todas luces injustificable. Es cierto que los puños de Fury fueron sumamente escasos, pero entre decantarte por un boxeador que falla todos y cada uno de sus golpes y otro que lanza un par y anota un par la elección resulta sencilla por el segundo, ya que lo que se valora en un round de boxeo es la efectividad ofensiva. Por otro lado, hay algunos que señalan vehementemente que como Parker tuvo un mejor final, después de un desarrollo tedioso, él merece la victoria, pero esta valoración significa simplemente que quienes afirman esto no saben como se puntúa un combate de boxeo. Da igual que los últimos dos rounds sean los mejores de la historia del deporte para el púgil A, que si el púgil B ha ganado los diez anteriores haciendo sólo lo justo y necesario, igualmente, el púgil B será el vencedor claro de la contienda por 118-110. De todos modos, hay que destacar que ni Parker tuvo una reacción final tan buena, al contrario, ni Fury hizo lo suficiente para hacer incuestionable su dominio.
De todos modos, se debe dejar claro algo. Es verdad que Fury recurrió a una potencia de golpeo ridículamente baja, al igual que su cadencia, pero si contamos que la efectividad defensiva es un criterio a tener en cuenta en la valoración de un episodio, todos los rounds que estuvieron igualados y no tuvieron acciones ofensivas destacadas deberían ir a parar al boxeador que mejor defensa mostró, indudablemente Fury, que así merecería la victoria con cierto margen. Pese a ello, los jueces optaron por sobrevalorar la presión, como si por ella exclusivamente un boxeador, sin lanzar manos, pudiese hacerse con un round. Si las acciones defensivas no cuentan para ganar un combate, habría que dudar de los resultados de una gran cantidad de combates de Jack Johnson, Willie Pep, Pernall Whitaker, Floyd Mayweather y de los demás expertos defensivos. Pero las cosas no funcionan así. Por otra parte, cuando a la cúpula boxística le interesa que Mayweather conserve su 0 contra Maidana o Castillo, los jueces se olvidan de la tendencia mayoritaria de decantarse, en caso de duda, por los boxeadores que presionan. En cambio, cuando a la élite dirigente del boxeo le interesa la victoria de Parker, los jueces se sacan de la chistera, como el mejor de los magos, un doble 118-110 para premiar simplemente el caminar hacia delante, porque el neozelandés no boxeó, sólo se comportó como un perro de presa sin instinto, astucia, velocidad o fiereza.
De nuevo, no hay que pensar que Fury hizo una gran actuación, porque por momentos resultó penoso que consumiese minutos sin intentar ni siquiera conectar una mano. Pero, igualmente, Parker no hizo ningún honor a su corona mundial del peso pesado, ya que boxeó como un púgil de nivel bajo que no tiene otro recurso más que su avance frontal o como un novato que se piensa que puede ganar por ser sólo más fuerte que su oponente. Es por ello que, aunque ha habido algunos monarcas WBO bastante cuestionables, y excluyendo a los titulares regulares e interinos WBA, Joseph Parker es uno de los peores boxeadores que ha logrado una corona mundial en la historia del peso pesado.
La diferencia con boxeadores de las primeras épocas (no sólo en el caso de Parker, también en el de otros) es que es más alto y pesa nada más y nada menos que 111 kg, pero por lo demás, cualquier púgil destacado en la historia de la categoría podría darle una lección de boxeo, incluso los considerados como más toscos, cosa que no hace más que poner de manifiesto que quienes dicen que el peso pesado está renaciendo y que se encamina a una nueva edad dorada se equivocan.
Enlazando con este tema hay que responder a una cuestión, puesto que puede surgir la pregunta de porqué a los titiriteros que mueven los hilos del boxeo les interesa la victoria de Parker. La respuesta es muy sencilla. Actualmente la cumbre libra por libra está en teoría vacía (esta idea surge de los medios estadounidenses que se niegan a poner en el número 1 a alguien que no encaje con sus consideraciones político-sociales), y se busca una nueva figura que la llene, siendo para muchos el elegido Anthony Joshua.
Además, se pretende que Joshua se convierta en una nueva figura histórica de la división que mueva millones sólo por su fama. Para que Joshua se haga un nombre destacado uno de los aspectos ineludibles es que logre ser titular unificado y para ello se necesita al monarca WBO Joseph Parker. Se dice que al final del camino puede haber una unificación total ante Deontay Wilder, pero antes de ello, Joshua seguramente se encamine a una unificación ante Parker que no tendrá ningún problema en superar, como no lo tendría ningún boxeador de la élite, incluso de la actual. Muchos considerarán que Hughie Fury no habría generado dificultades a Joshua, cosa que puede ser cierta, pero siempre habría un riesgo de que su heterodoxia y su buena defensa hiciesen que Joshua no luciese o incluso que se agotase por su gran musculatura, que le haría cobrarse un precio alto con cada uno de sus errores. Pero ante Parker no habrá dificultad alguna, y la victoria antes del límite es segura, puesto que no hay ni un sólo elemento destacable en su boxeo.
Así, otra vez las piezas encajan. ¿Porqué dar un 118-110 doble sin sentido contra Hughie Fury? Porque interesa una unificación entre Joshua y Parker, que es una víctima propiciatoria. Seguramente muchos no vean que se están poniendo las bases para, explotando las cualidades de un buen boxeador (algo innegable) como Joshua, crear un icono boxístico, algo que está en marcha desde antes de su debut profesional.
Aunque un año antes de su participación en los Juegos Olímpicos fue arrestado por posesión e intento de distribución de drogas, cosa que podría haberle supuesto una pena de cárcel de 14 años en Reino Unido, se le impusieron trabajos sociales y ni si quiera se le apartó de la participación en los Juegos de Londres, donde, a pesar de no imponerse sobre el ring a Dychko y Cammarrelle, los jueces le dieron victorias que le supusieron una medalla de oro inmerecida.
Posteriormente, debutó como profesional con un grado de atención incomprensible, rebosando las páginas de diversos medios cuando sólo noqueaba a púgiles modestísimos. Sus problemas ante Dillian Whyte se minimizaron, adquirió su corona IBF ante un Charles Martin que no merecía el título que poseía (Glazkov se lesionó una pierna en la pelea por el cetro vacante) y posteriormente sus victorias ante Breazeale y Molina, que no eran púgiles merecedores ni siquiera del top 10, se volvieron a sobrevalorar. Finalmente, aunque Tyson Fury no había recibido más que faltas de respeto por su formidable victoria ante un Wladimir Klitschko que había reinado durante una década, Joshua recibió desbordantes e incomprensibles loas por batir al mismo Klitschko posteriormente, cuando además "AJ" estuvo a punto de ser noqueado en esa misma pelea. Como siempre, el hilo conductor queda claro para el que quiera verlo, pero es difícil cuando todos los agentes mediáticos substituyen cada crítica por una alabanza. Así, su turbio pasado, que es arrojado a la cara de otros boxeadores flagelando su confianza y su moral, es sólo una “historia de superación” y sus fáciles triunfos ante rivales modestos son “la muestra de su grandeza”.
En la historia de todos los deportes se han creado figuras icónicas de forma artificial, porque es tan sencillo como valorar de más los logros de alguien para conseguir que los organizadores se lleven ingentes sumas de dinero (como pasa ahora con Joshua y antes con Mayweather, hablando de boxeo). Todo ello sin olvidar las repercusiones, socio-políticas que estas figuras pueden tener en un determinado contexto. Por ello, con todos los intereses favoreciendo el auge de Joshua será difícil que, contando además con muchas cualidades, no se logre que se convierta en poco tiempo en la figura central del pugilismo, sino lo es ya para muchos. Es por esto que sólo nos queda esperar que no se incumplan las normas para que Joshua siga elevando su consideración, que, por el bien del boxeo, le lleguen retos de calidad que no queden truncados por el camino de forma más que extraña, como en el caso del Wilder-Povetkin, y que una vez que se lleven a cabo irregularidades los destellos de su fama no cieguen a los aficionados, que siempre serán los garantes de velar porque la historia del boxeo y sus grandes nombres no sean sustituidos por combates mal emparejados y púgiles sobrevalorados.
La contienda tuvo un desarrollo monótono, con Parker persiguiendo constantemente a un Fury que se desplazaba cercano a las cuerdas tirando su jab. Hay que subrayar que ninguno de los dos boxeadores hizo incontestable su primacía, puesto que la presión de Parker resultaba irregular e ineficaz, no logrando alcanzar la distancia corta más que en desordenadas embestidas, y Fury ni siquiera contaba con precisión o contundencia en su jab, prácticamente el único golpe que lanzaba, por lo que hubo diversos asaltos que tuvieron muy poco que destacar en cuanto a acciones ofensivas efectivas.
En el ámbito contrario, en acierto defensivo, Hughie Fury sí ofreció una actuación abrumadoramente superior, dado que hubo varios rounds en los que Parker no acertó ni una sola mano, llegando a lanzar series de media decena de golpes de los que no estaba cerca de anotar ninguno de ellos. Para evitarlos, Fury no sólo tiraba de movilidad, sino que se dejaba caer sobre las cuerdas para quedar fuera del alcance del visitante, al que también esquivó, con leves giros de cintura u hombros, y bloqueó.
Ciertamente, los ataques de Parker eran tan previsibles, precipitados y desordenados que Fury no tuvo problemas para evitar casi la totalidad de ellos. Además, cuando el campeón logró permanecer en la distancia corta, el local recurría a un clinch que fue la última arma utilizada para neutralizar al neozelandés. Por otro lado, no hay que olvidar que entre todas las ofensivas erradas por parte de Parker, y a pesar de que Fury se centró demasiado en un jab flojísimo, en ocasiones el retador conectó claros contragolpes en uppercut, hook o incluso directo.
La excepción a esta tónica, en la que Parker también tuvo largos periodos de inactividad, llegó en los últimos rounds cuando el campeón sí que consiguió anotar algunas manos claras, como un par de derechas en el último episodio. Con todo, esto no sirvió para modificar la percepción de que su actuación fue nefasta.
Dicho esto, que dos jueces otorgasen todos los asaltos menos dos a Parker es, una semana más, una atroz ignominia y un claro signo de corrupción. Y es que otorgarle diez asaltos a Parker significa que se le dieron rounds en los que no acertó ni un sólo golpe, cosa que resulta a todas luces injustificable. Es cierto que los puños de Fury fueron sumamente escasos, pero entre decantarte por un boxeador que falla todos y cada uno de sus golpes y otro que lanza un par y anota un par la elección resulta sencilla por el segundo, ya que lo que se valora en un round de boxeo es la efectividad ofensiva. Por otro lado, hay algunos que señalan vehementemente que como Parker tuvo un mejor final, después de un desarrollo tedioso, él merece la victoria, pero esta valoración significa simplemente que quienes afirman esto no saben como se puntúa un combate de boxeo. Da igual que los últimos dos rounds sean los mejores de la historia del deporte para el púgil A, que si el púgil B ha ganado los diez anteriores haciendo sólo lo justo y necesario, igualmente, el púgil B será el vencedor claro de la contienda por 118-110. De todos modos, hay que destacar que ni Parker tuvo una reacción final tan buena, al contrario, ni Fury hizo lo suficiente para hacer incuestionable su dominio.
De todos modos, se debe dejar claro algo. Es verdad que Fury recurrió a una potencia de golpeo ridículamente baja, al igual que su cadencia, pero si contamos que la efectividad defensiva es un criterio a tener en cuenta en la valoración de un episodio, todos los rounds que estuvieron igualados y no tuvieron acciones ofensivas destacadas deberían ir a parar al boxeador que mejor defensa mostró, indudablemente Fury, que así merecería la victoria con cierto margen. Pese a ello, los jueces optaron por sobrevalorar la presión, como si por ella exclusivamente un boxeador, sin lanzar manos, pudiese hacerse con un round. Si las acciones defensivas no cuentan para ganar un combate, habría que dudar de los resultados de una gran cantidad de combates de Jack Johnson, Willie Pep, Pernall Whitaker, Floyd Mayweather y de los demás expertos defensivos. Pero las cosas no funcionan así. Por otra parte, cuando a la cúpula boxística le interesa que Mayweather conserve su 0 contra Maidana o Castillo, los jueces se olvidan de la tendencia mayoritaria de decantarse, en caso de duda, por los boxeadores que presionan. En cambio, cuando a la élite dirigente del boxeo le interesa la victoria de Parker, los jueces se sacan de la chistera, como el mejor de los magos, un doble 118-110 para premiar simplemente el caminar hacia delante, porque el neozelandés no boxeó, sólo se comportó como un perro de presa sin instinto, astucia, velocidad o fiereza.
De nuevo, no hay que pensar que Fury hizo una gran actuación, porque por momentos resultó penoso que consumiese minutos sin intentar ni siquiera conectar una mano. Pero, igualmente, Parker no hizo ningún honor a su corona mundial del peso pesado, ya que boxeó como un púgil de nivel bajo que no tiene otro recurso más que su avance frontal o como un novato que se piensa que puede ganar por ser sólo más fuerte que su oponente. Es por ello que, aunque ha habido algunos monarcas WBO bastante cuestionables, y excluyendo a los titulares regulares e interinos WBA, Joseph Parker es uno de los peores boxeadores que ha logrado una corona mundial en la historia del peso pesado.
La diferencia con boxeadores de las primeras épocas (no sólo en el caso de Parker, también en el de otros) es que es más alto y pesa nada más y nada menos que 111 kg, pero por lo demás, cualquier púgil destacado en la historia de la categoría podría darle una lección de boxeo, incluso los considerados como más toscos, cosa que no hace más que poner de manifiesto que quienes dicen que el peso pesado está renaciendo y que se encamina a una nueva edad dorada se equivocan.
Enlazando con este tema hay que responder a una cuestión, puesto que puede surgir la pregunta de porqué a los titiriteros que mueven los hilos del boxeo les interesa la victoria de Parker. La respuesta es muy sencilla. Actualmente la cumbre libra por libra está en teoría vacía (esta idea surge de los medios estadounidenses que se niegan a poner en el número 1 a alguien que no encaje con sus consideraciones político-sociales), y se busca una nueva figura que la llene, siendo para muchos el elegido Anthony Joshua.
Además, se pretende que Joshua se convierta en una nueva figura histórica de la división que mueva millones sólo por su fama. Para que Joshua se haga un nombre destacado uno de los aspectos ineludibles es que logre ser titular unificado y para ello se necesita al monarca WBO Joseph Parker. Se dice que al final del camino puede haber una unificación total ante Deontay Wilder, pero antes de ello, Joshua seguramente se encamine a una unificación ante Parker que no tendrá ningún problema en superar, como no lo tendría ningún boxeador de la élite, incluso de la actual. Muchos considerarán que Hughie Fury no habría generado dificultades a Joshua, cosa que puede ser cierta, pero siempre habría un riesgo de que su heterodoxia y su buena defensa hiciesen que Joshua no luciese o incluso que se agotase por su gran musculatura, que le haría cobrarse un precio alto con cada uno de sus errores. Pero ante Parker no habrá dificultad alguna, y la victoria antes del límite es segura, puesto que no hay ni un sólo elemento destacable en su boxeo.
Así, otra vez las piezas encajan. ¿Porqué dar un 118-110 doble sin sentido contra Hughie Fury? Porque interesa una unificación entre Joshua y Parker, que es una víctima propiciatoria. Seguramente muchos no vean que se están poniendo las bases para, explotando las cualidades de un buen boxeador (algo innegable) como Joshua, crear un icono boxístico, algo que está en marcha desde antes de su debut profesional.
Aunque un año antes de su participación en los Juegos Olímpicos fue arrestado por posesión e intento de distribución de drogas, cosa que podría haberle supuesto una pena de cárcel de 14 años en Reino Unido, se le impusieron trabajos sociales y ni si quiera se le apartó de la participación en los Juegos de Londres, donde, a pesar de no imponerse sobre el ring a Dychko y Cammarrelle, los jueces le dieron victorias que le supusieron una medalla de oro inmerecida.
Posteriormente, debutó como profesional con un grado de atención incomprensible, rebosando las páginas de diversos medios cuando sólo noqueaba a púgiles modestísimos. Sus problemas ante Dillian Whyte se minimizaron, adquirió su corona IBF ante un Charles Martin que no merecía el título que poseía (Glazkov se lesionó una pierna en la pelea por el cetro vacante) y posteriormente sus victorias ante Breazeale y Molina, que no eran púgiles merecedores ni siquiera del top 10, se volvieron a sobrevalorar. Finalmente, aunque Tyson Fury no había recibido más que faltas de respeto por su formidable victoria ante un Wladimir Klitschko que había reinado durante una década, Joshua recibió desbordantes e incomprensibles loas por batir al mismo Klitschko posteriormente, cuando además "AJ" estuvo a punto de ser noqueado en esa misma pelea. Como siempre, el hilo conductor queda claro para el que quiera verlo, pero es difícil cuando todos los agentes mediáticos substituyen cada crítica por una alabanza. Así, su turbio pasado, que es arrojado a la cara de otros boxeadores flagelando su confianza y su moral, es sólo una “historia de superación” y sus fáciles triunfos ante rivales modestos son “la muestra de su grandeza”.
En la historia de todos los deportes se han creado figuras icónicas de forma artificial, porque es tan sencillo como valorar de más los logros de alguien para conseguir que los organizadores se lleven ingentes sumas de dinero (como pasa ahora con Joshua y antes con Mayweather, hablando de boxeo). Todo ello sin olvidar las repercusiones, socio-políticas que estas figuras pueden tener en un determinado contexto. Por ello, con todos los intereses favoreciendo el auge de Joshua será difícil que, contando además con muchas cualidades, no se logre que se convierta en poco tiempo en la figura central del pugilismo, sino lo es ya para muchos. Es por esto que sólo nos queda esperar que no se incumplan las normas para que Joshua siga elevando su consideración, que, por el bien del boxeo, le lleguen retos de calidad que no queden truncados por el camino de forma más que extraña, como en el caso del Wilder-Povetkin, y que una vez que se lleven a cabo irregularidades los destellos de su fama no cieguen a los aficionados, que siempre serán los garantes de velar porque la historia del boxeo y sus grandes nombres no sean sustituidos por combates mal emparejados y púgiles sobrevalorados.
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lunes, 25 de septiembre de 2017
Resultados de los mejores combates de viernes y sábado (22y23/9/2017)
Viernes 22 de septiembre
El campeón WBO del peso pluma Óscar Valdez tuvo que reponerse de una caída pero derrotó al difícil retador Genesis Servania por decisión unánime.
Podéis leer la crónica del mundial Valdez-Servania en este link a Espabox
En el semifondo, el monarca WBO del peso supermedio Gilberto Ramírez tumbó y derrotó por decisión unánime al aspirante obligatorio Jesse Hart.
Podéis leer la crónica del mundial Ramírez-Hart en este link a Espabox
Respecto al resto de combates de esta velada, el 4º WBO del peso wélter Egidijus Kavaliauskas 18(15KO)-0 siguió ensanchando su porcentaje de nocauts derrotando a Mahonry Montes 33(22KO)-7(2)-1 por KO Técnico en el séptimo round, triunfo que es, sin duda, el mayor de su carrera y que debería llevarle a medio plazo a una pelea ante un rival de renombre que le dé el prestigio suficiente para poder acceder al mundial de la Organización. También lograron victorias antes del límite los medallistas olímpicos Robson Conceiçao 5(4KO)-0 y Michael Conlan 4(4KO)-0, el primero por abandono en el tercer asalto ante Carlos Osorio 13(5KO)-8(4)-1 y el segundo por KO Técnico en dos episodios ante Kenny Guzmán 3(1KO)-1(1), por lo que ambos dan un paso más en su desarrollo, apuntan a duelos más exigentes y siguen afianzando su proyección como futuros retadores mundiales, respectivamente en la división superpluma y en la pluma.
Dejando de lado este evento, el peso superwélter Sergio García 25(13KO)-0 logró un fantástico triunfo ante el duro italiano Felice Moncelli 17(5KO)-5(1)-1, al que, con una buena actuación, derrotó por abandono en el séptimo asalto. Con ello, García no sólo da un paso importantísimo para entrar, junto al resto del top 5 WBC, en la lucha directa por el mundial, sino que evidencia el fenomenal momento por el que pasa, de modo que es de esperar que en su próxima subida al ring, si hace frente a un rival de nivel aún más alto en una definitiva prueba de fuego, se pueda situar, de vencer, al alcance de la eliminatoria o del mundial.
Señalamos que Alessandro Goddi 32(15KO)-2-1 tenía una buena oportunidad de dar la sorpresa ante el imbatido Andrew Francillete 20(5KO)-0-1 y, efectivamente, el italiano logró la victoria contra pronóstico, imponiéndose a los puntos por decisión dividida y cartulinas de doble 115-113 y 113-115. Así, Goddi tras una ajustada derrota por el cinturón europeo, logra su victoria más importante que, en virtud de un título menor, debería llevarle al top 15 WBA del peso medio, donde, eso sí, tendrá enormemente complicado medrar por su incapacidad para ser incuestionable en sus triunfos.
En una pelea en la que ambos visitaron la lona, Isidro Ranoni Prieto 27(22KO)-2(1)-3 se impuso a Martín Fidel Ríos 22(12KO)-13(2)-4 por decisión unánime y tarjetas de 98-92’5, 97-91, 96-92. Como se podía esperar, Ríos le ofreció una pelea en la que se vio obligado a trabajar, aunque quizás el knockdown padecido pueda indicar que Prieto necesitará tomarse con más calma su pretensión de retornar a la parte alta de las listas del peso semipesado y afrontar algunos rodajes más antes de aceptar duelos de dificultad decisiva.
Quien sí logró su acceso directo al top 15 WBO del peso mosca fue Ángel Moreno 16(5KO)-2-2 que, haciendo valer su superioridad técnica, se impuso al mexicano José Rivas 15(8KO)-13(2)-4 por decisión unánime y puntuaciones 96-94 y doble 97-93. La división del peso mosca tiene un nivel medio altísimo y Moreno tendrá ante sí un reto complicadísimo compartiendo lista con rivales como Viloria, Pedro Guevara, Francisco Rodríguez o Andrew Selby, aunque igualmente se pueden encontrar en el ranking WBO oponentes a los que perfectamente podría batir para verse alzado a una enorme oportunidad posteriormente.
También en el evento, la campeona de Europa del peso mínimo Joana Pastrana 11(4KO)-1 retuvo su corona derrotando a Judit Hachbold 4(0KO)-2(1) por KO en tres episodios, por lo que se afianza como una de las aspirantes más destacadas de la división, pareciendo inevitable que, de alargar algo más su racha de triunfos, pueda verse elevada al primer mundial de su carrera, quizás a lo largo del próximo año. Hay que destacar que Pastrana es 2ª IBF, sólo adelantada por Etsuko Tada, de modo que si la japonesa pierde su combate de noviembre ante Naoko Shibata la española podría quedar como la mejor situada para retar a la china Cai Zong Ju.
En cuanto al resto de duelos destacados de la jornada de viernes:
- El peso ligero Cam O’Connell 16(10KO)-1-1 se recuperó de su primera derrota como profesional venciendo por decisión unánime (77-75-doble y 78-74) ajustada a Guadalupe Rosales 34(18KO)-14(4), de modo que reinicia su pugna por acceder a las listas mundiales.
- El peso pluma Lusanda Komanisi 21(18KO)-4(2) fue arrollado en dos asaltos por Jhack Tepora 21(16KO)-0, boxeador filipino que demuestra una vez más su peligro a la vez que se alza al top 5 WBO.
- El peso superligero de buen bagaje amateur Devin Haney 17(11KO)-0 consiguió una amplísima victoria unánime (80-72 doble y 80-71) sobre Enrique Tinoco 16(12KO)-5(1)-3, demostrando que puede ser un nombre a tener en cuenta en la división.
Sábado 23 de septiembre
En el choque entre noqueadores de los cuartos de final de las World Boxing Super Series, Yunier Dorticós se hizo con el pase a la semifinal noqueando en dos asaltos a Dmitry Kudryashov.
Podéis leer la crónica del Dorticós-Kudryashov en este link a Espabox
En el respaldo de dicho cartel, el excampeón Nonito Donaire 38(24KO)-4(1) se recuperó de su derrota ante Magdaleno superando a Rubén García Hernández 22(9KO)-3(1)-1 por decisión unánime (97-93, 99-91, 100-90), siendo de esperar que acceda ahora a un gran combate en el que, seguramente, estando en claro deterioro, no podrá imponerse. También el peso crucero Keith Tapia 18(11KO)-1 consiguió una espléndida victoria ante el durísimo Lateef Kayode 21(16KO)-2(2), al que derribó y derrotó por amplísima decisión unánime (100-89 triple) para demostrar que el tropiezo ante Tabiti sólo ha hecho que permitirle evolucionar.
Por otro lado, en la que fue la peor pelea del fin de semana, el monarca mundial WBO del peso pesado Joseph Parker 24(18KO)-0 conservó su título derrotando con una decisión mayoritaria (118-110 doble y 114-114) sumamente controvertida al retador obligatorio Hughie Fury 20(10KO)-1. El choque merece un análisis que publicaremos próximamente, pero basta con decir por el momento que Parker erró casi todos sus ataques y que es uno de los peores boxeadores que ha ostentado una corona mundial absoluta en la división máxima para poner de manifiesto que el peso pesado, al contrario de lo que se afirma constantemente, no está renaciendo.
En la misma velada, el exretador mundial superwélter “Jimmy” Kilrain Kelly 23(9KO)-1(1) no tuvo problemas para derrotar en cuatro asaltos al asequible Stiliyan Kostov 21(16KO)-8(5), capturar un título menor WBO y reingresar en la lista de dicho organismo. Además, el campeón británico del peso gallo Josh Wale 25(12KO)-9(2)-2 noqueó en once asaltos a Don Broadhurst 19(4KO)-4(1)-1, logrando su primera defensa y su quinta victoria consecutiva, que debería permitirle enfrentarse a continuación a uno de los boxeadores con más renombre del circuito de su país.
En cuanto a la última velada destacada del fin de semana, Jorge Linares 43(27KO)-3(3) venció al retador obligatorio Luke Campbell 17(14KO)-2 por decisión unánime (115-112, 114-113 y 113-115) para retener su título WBA del peso ligero, siendo clave en el resultado un knockdown padecido por el aspirante en el segundo round. Ciertamente, Campbell ofreció una excelente segunda mitad y estuvo a un paso de derrotar al venezolano que, si bien conserva su condición de número 1 de la división, lo hace generando algunas dudas y mostrando nuevamente problemas tácticos que pueden ser perfectamente explotados por futuros rivales.
Finalmente, en los duelos de acompañamiento de este campeonato, el filipino peso ligero Romero Duno 15(13KO)-1 consiguió una meritoria victoria unánime (78-74 triple) ante el difícil Juan Pablo Sánchez 30(14KO)-14(8) para dar un paso más hacia las grandes peleas en la división y Azat Hovhannisyan 13(10KO)-2 verá su nombre bien posicionado en el ranking WBC del peso supergallo por la adquisición de un título menor ante Sergio Frías 19(10KO)-8(4)-2, al que venció por decisión unánime (100-90 doble y 98-92).
El campeón WBO del peso pluma Óscar Valdez tuvo que reponerse de una caída pero derrotó al difícil retador Genesis Servania por decisión unánime.
Podéis leer la crónica del mundial Valdez-Servania en este link a Espabox
En el semifondo, el monarca WBO del peso supermedio Gilberto Ramírez tumbó y derrotó por decisión unánime al aspirante obligatorio Jesse Hart.
Podéis leer la crónica del mundial Ramírez-Hart en este link a Espabox
Respecto al resto de combates de esta velada, el 4º WBO del peso wélter Egidijus Kavaliauskas 18(15KO)-0 siguió ensanchando su porcentaje de nocauts derrotando a Mahonry Montes 33(22KO)-7(2)-1 por KO Técnico en el séptimo round, triunfo que es, sin duda, el mayor de su carrera y que debería llevarle a medio plazo a una pelea ante un rival de renombre que le dé el prestigio suficiente para poder acceder al mundial de la Organización. También lograron victorias antes del límite los medallistas olímpicos Robson Conceiçao 5(4KO)-0 y Michael Conlan 4(4KO)-0, el primero por abandono en el tercer asalto ante Carlos Osorio 13(5KO)-8(4)-1 y el segundo por KO Técnico en dos episodios ante Kenny Guzmán 3(1KO)-1(1), por lo que ambos dan un paso más en su desarrollo, apuntan a duelos más exigentes y siguen afianzando su proyección como futuros retadores mundiales, respectivamente en la división superpluma y en la pluma.
Dejando de lado este evento, el peso superwélter Sergio García 25(13KO)-0 logró un fantástico triunfo ante el duro italiano Felice Moncelli 17(5KO)-5(1)-1, al que, con una buena actuación, derrotó por abandono en el séptimo asalto. Con ello, García no sólo da un paso importantísimo para entrar, junto al resto del top 5 WBC, en la lucha directa por el mundial, sino que evidencia el fenomenal momento por el que pasa, de modo que es de esperar que en su próxima subida al ring, si hace frente a un rival de nivel aún más alto en una definitiva prueba de fuego, se pueda situar, de vencer, al alcance de la eliminatoria o del mundial.
Señalamos que Alessandro Goddi 32(15KO)-2-1 tenía una buena oportunidad de dar la sorpresa ante el imbatido Andrew Francillete 20(5KO)-0-1 y, efectivamente, el italiano logró la victoria contra pronóstico, imponiéndose a los puntos por decisión dividida y cartulinas de doble 115-113 y 113-115. Así, Goddi tras una ajustada derrota por el cinturón europeo, logra su victoria más importante que, en virtud de un título menor, debería llevarle al top 15 WBA del peso medio, donde, eso sí, tendrá enormemente complicado medrar por su incapacidad para ser incuestionable en sus triunfos.
En una pelea en la que ambos visitaron la lona, Isidro Ranoni Prieto 27(22KO)-2(1)-3 se impuso a Martín Fidel Ríos 22(12KO)-13(2)-4 por decisión unánime y tarjetas de 98-92’5, 97-91, 96-92. Como se podía esperar, Ríos le ofreció una pelea en la que se vio obligado a trabajar, aunque quizás el knockdown padecido pueda indicar que Prieto necesitará tomarse con más calma su pretensión de retornar a la parte alta de las listas del peso semipesado y afrontar algunos rodajes más antes de aceptar duelos de dificultad decisiva.
Quien sí logró su acceso directo al top 15 WBO del peso mosca fue Ángel Moreno 16(5KO)-2-2 que, haciendo valer su superioridad técnica, se impuso al mexicano José Rivas 15(8KO)-13(2)-4 por decisión unánime y puntuaciones 96-94 y doble 97-93. La división del peso mosca tiene un nivel medio altísimo y Moreno tendrá ante sí un reto complicadísimo compartiendo lista con rivales como Viloria, Pedro Guevara, Francisco Rodríguez o Andrew Selby, aunque igualmente se pueden encontrar en el ranking WBO oponentes a los que perfectamente podría batir para verse alzado a una enorme oportunidad posteriormente.
También en el evento, la campeona de Europa del peso mínimo Joana Pastrana 11(4KO)-1 retuvo su corona derrotando a Judit Hachbold 4(0KO)-2(1) por KO en tres episodios, por lo que se afianza como una de las aspirantes más destacadas de la división, pareciendo inevitable que, de alargar algo más su racha de triunfos, pueda verse elevada al primer mundial de su carrera, quizás a lo largo del próximo año. Hay que destacar que Pastrana es 2ª IBF, sólo adelantada por Etsuko Tada, de modo que si la japonesa pierde su combate de noviembre ante Naoko Shibata la española podría quedar como la mejor situada para retar a la china Cai Zong Ju.
En cuanto al resto de duelos destacados de la jornada de viernes:
- El peso ligero Cam O’Connell 16(10KO)-1-1 se recuperó de su primera derrota como profesional venciendo por decisión unánime (77-75-doble y 78-74) ajustada a Guadalupe Rosales 34(18KO)-14(4), de modo que reinicia su pugna por acceder a las listas mundiales.
- El peso pluma Lusanda Komanisi 21(18KO)-4(2) fue arrollado en dos asaltos por Jhack Tepora 21(16KO)-0, boxeador filipino que demuestra una vez más su peligro a la vez que se alza al top 5 WBO.
- El peso superligero de buen bagaje amateur Devin Haney 17(11KO)-0 consiguió una amplísima victoria unánime (80-72 doble y 80-71) sobre Enrique Tinoco 16(12KO)-5(1)-3, demostrando que puede ser un nombre a tener en cuenta en la división.
Sábado 23 de septiembre
En el choque entre noqueadores de los cuartos de final de las World Boxing Super Series, Yunier Dorticós se hizo con el pase a la semifinal noqueando en dos asaltos a Dmitry Kudryashov.
Podéis leer la crónica del Dorticós-Kudryashov en este link a Espabox
En el respaldo de dicho cartel, el excampeón Nonito Donaire 38(24KO)-4(1) se recuperó de su derrota ante Magdaleno superando a Rubén García Hernández 22(9KO)-3(1)-1 por decisión unánime (97-93, 99-91, 100-90), siendo de esperar que acceda ahora a un gran combate en el que, seguramente, estando en claro deterioro, no podrá imponerse. También el peso crucero Keith Tapia 18(11KO)-1 consiguió una espléndida victoria ante el durísimo Lateef Kayode 21(16KO)-2(2), al que derribó y derrotó por amplísima decisión unánime (100-89 triple) para demostrar que el tropiezo ante Tabiti sólo ha hecho que permitirle evolucionar.
Por otro lado, en la que fue la peor pelea del fin de semana, el monarca mundial WBO del peso pesado Joseph Parker 24(18KO)-0 conservó su título derrotando con una decisión mayoritaria (118-110 doble y 114-114) sumamente controvertida al retador obligatorio Hughie Fury 20(10KO)-1. El choque merece un análisis que publicaremos próximamente, pero basta con decir por el momento que Parker erró casi todos sus ataques y que es uno de los peores boxeadores que ha ostentado una corona mundial absoluta en la división máxima para poner de manifiesto que el peso pesado, al contrario de lo que se afirma constantemente, no está renaciendo.
En la misma velada, el exretador mundial superwélter “Jimmy” Kilrain Kelly 23(9KO)-1(1) no tuvo problemas para derrotar en cuatro asaltos al asequible Stiliyan Kostov 21(16KO)-8(5), capturar un título menor WBO y reingresar en la lista de dicho organismo. Además, el campeón británico del peso gallo Josh Wale 25(12KO)-9(2)-2 noqueó en once asaltos a Don Broadhurst 19(4KO)-4(1)-1, logrando su primera defensa y su quinta victoria consecutiva, que debería permitirle enfrentarse a continuación a uno de los boxeadores con más renombre del circuito de su país.
En cuanto a la última velada destacada del fin de semana, Jorge Linares 43(27KO)-3(3) venció al retador obligatorio Luke Campbell 17(14KO)-2 por decisión unánime (115-112, 114-113 y 113-115) para retener su título WBA del peso ligero, siendo clave en el resultado un knockdown padecido por el aspirante en el segundo round. Ciertamente, Campbell ofreció una excelente segunda mitad y estuvo a un paso de derrotar al venezolano que, si bien conserva su condición de número 1 de la división, lo hace generando algunas dudas y mostrando nuevamente problemas tácticos que pueden ser perfectamente explotados por futuros rivales.
Finalmente, en los duelos de acompañamiento de este campeonato, el filipino peso ligero Romero Duno 15(13KO)-1 consiguió una meritoria victoria unánime (78-74 triple) ante el difícil Juan Pablo Sánchez 30(14KO)-14(8) para dar un paso más hacia las grandes peleas en la división y Azat Hovhannisyan 13(10KO)-2 verá su nombre bien posicionado en el ranking WBC del peso supergallo por la adquisición de un título menor ante Sergio Frías 19(10KO)-8(4)-2, al que venció por decisión unánime (100-90 doble y 98-92).
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sábado, 23 de septiembre de 2017
Los mejores combates de este sábado (23/9/2017)
Aunque se producirán tres importantes veladas con cinturones en juego y enorme trascendencia para sus respectivas divisiones, la actividad destacada de esta jornada de sábado estará casi limitada a estas veladas, estando por lo demás la jornada caracterizada por peleas sumamente decantadas del lado de los abrumadores favoritos.
Quizás, el enfrentamiento más espectacular de este sábado sea el choque de cuartos de final de las World Boxing Super Series en el que se enfrentarán Yunier Dorticós y Dmitry Kudryashov.
Podéis leer la previa del Dorticós-Kudryashov en este link a Espabox
Este evento, que será retransmitido por Match Tv y que se disputará en al Alamodome de San Antonio (Estados Unidos), contará también con tres mencionables peleas: el retorno a los rings del excampeón Nonito Donaire 37(24KO)-4(1) ante un Rubén García Hernández 22(9KO)-2(1)-1 asequible para su nivel; un combate excelentemente emparejado entre los peso crucero Keith Tapia 17(11KO)-1 y Lateef Kayode 21(16KO)-1(1); y un exigente duelo de desarrollo para el prometedor peso wélter Eimantas Stanionis 2(2KO)-0 ante Óscar Valenzuela 9(5KO)-2-1.
De todos modos, quizás para muchos la velada que contará con un mejor duelo estelar es la que estará encabezada por el mundial WBO del peso pesado, en el que se enfrentarán el titular Joseph Parker 23(18KO)-0 y el retador obligatorio Hughie Fury 20(10KO)-0. La mayoría de críticos y aficionados consideran que Parker no tendrá rival en el británico, aunque recientemente el neozelandés está rindiendo a un nivel verdaderamente bajo. Los múltiples errores realizados ante Carlos Takam se han repetido ante Andy Ruiz y Razvan Cojanu, boxeador asequible ante el que ofreció una pésima actuación. Por ello, midiéndose a un Fury que, sin contar con tanta fuerza, es un boxeador muy hábil y que peleará como local, las posibilidades de que el monarca se vea destronado no son ni muchísimo menos descartables. Con todo, si Fury, como muchos esperan, se estancase tácticamente, Parker debería poder retener su corona, si bien será difícil que se libre de las complicaciones.
En el respaldo del evento, el exretador mundial “Jimmy” Kilrain Kelly 22(8KO)-1(1) tratará de alzarse al top 15 WBO del peso superwélter derrotando al sencillo búlgaro Stiliyan Kostov 21(16KO)-7(4), mientras que Josh Wale 24(11KO)-9(2)-2 y Don Broadhurst 19(4KO)-3-1 combatirán en un buen campeonato británico del peso gallo.
Finalmente, el restante campeonato mundial de la jornada será el que tendrá como protagonistas al monarca WBA del peso ligero Jorge Linares 42(27KO)-3(3) y al aspirante oficial Luke Campbell 17(14KO)-1, que pelearán en el Forum de Inglewood, Estados Unidos, con retransmisión de HBO. Para muchos el número 1 de la división del peso ligero, a pesar de la irrupción de Mikey García, sigue siendo Linares, pudiendo ambos enfrentarse en una formidable unificación de coronas en el inicio del próximo año. Sea como sea, antes de ello el venezolano deberá superar a un boxeador como el oro olímpico Campbell, púgil sumamente irregular. Cuando boxea al 100%, el británico es capaz de vencer sin problemas a cualquier rival en la categoría, pero es habitual verlo salteadamente ofreciendo un rendimiento muy bajo. Así, el resultado del encuentro parece estar completamente condicionado por la versión que Campbell pueda ofrecer de sí mismo, aunque se debería esperar una pelea igualada y táctica además de muy interesante.
En este evento también destacan tres peleas: el filipino Romero Duno 14(13KO)-1 tratará de agrandar su récord y añadirle brillo derrotando al muy competente Juan Pablo Sánchez 30(14KO)-13(8); Azat Hovhannisyan 12(10KO)-2 y Sergio Frías 19(10KO)7(4)-2 pugnarán por situar su nombre en el ranking WBC del peso supergallo; y el peso pluma Manuel Ávila 22(8KO)-1 intentará recuperarse de su derrota ante Joseph Díaz midiéndose a un Ramiro Robles 14(9KO)-6(2)-1 con mucha experiencia de calidad.
Quizás, el enfrentamiento más espectacular de este sábado sea el choque de cuartos de final de las World Boxing Super Series en el que se enfrentarán Yunier Dorticós y Dmitry Kudryashov.
Podéis leer la previa del Dorticós-Kudryashov en este link a Espabox
Este evento, que será retransmitido por Match Tv y que se disputará en al Alamodome de San Antonio (Estados Unidos), contará también con tres mencionables peleas: el retorno a los rings del excampeón Nonito Donaire 37(24KO)-4(1) ante un Rubén García Hernández 22(9KO)-2(1)-1 asequible para su nivel; un combate excelentemente emparejado entre los peso crucero Keith Tapia 17(11KO)-1 y Lateef Kayode 21(16KO)-1(1); y un exigente duelo de desarrollo para el prometedor peso wélter Eimantas Stanionis 2(2KO)-0 ante Óscar Valenzuela 9(5KO)-2-1.
De todos modos, quizás para muchos la velada que contará con un mejor duelo estelar es la que estará encabezada por el mundial WBO del peso pesado, en el que se enfrentarán el titular Joseph Parker 23(18KO)-0 y el retador obligatorio Hughie Fury 20(10KO)-0. La mayoría de críticos y aficionados consideran que Parker no tendrá rival en el británico, aunque recientemente el neozelandés está rindiendo a un nivel verdaderamente bajo. Los múltiples errores realizados ante Carlos Takam se han repetido ante Andy Ruiz y Razvan Cojanu, boxeador asequible ante el que ofreció una pésima actuación. Por ello, midiéndose a un Fury que, sin contar con tanta fuerza, es un boxeador muy hábil y que peleará como local, las posibilidades de que el monarca se vea destronado no son ni muchísimo menos descartables. Con todo, si Fury, como muchos esperan, se estancase tácticamente, Parker debería poder retener su corona, si bien será difícil que se libre de las complicaciones.
En el respaldo del evento, el exretador mundial “Jimmy” Kilrain Kelly 22(8KO)-1(1) tratará de alzarse al top 15 WBO del peso superwélter derrotando al sencillo búlgaro Stiliyan Kostov 21(16KO)-7(4), mientras que Josh Wale 24(11KO)-9(2)-2 y Don Broadhurst 19(4KO)-3-1 combatirán en un buen campeonato británico del peso gallo.
Finalmente, el restante campeonato mundial de la jornada será el que tendrá como protagonistas al monarca WBA del peso ligero Jorge Linares 42(27KO)-3(3) y al aspirante oficial Luke Campbell 17(14KO)-1, que pelearán en el Forum de Inglewood, Estados Unidos, con retransmisión de HBO. Para muchos el número 1 de la división del peso ligero, a pesar de la irrupción de Mikey García, sigue siendo Linares, pudiendo ambos enfrentarse en una formidable unificación de coronas en el inicio del próximo año. Sea como sea, antes de ello el venezolano deberá superar a un boxeador como el oro olímpico Campbell, púgil sumamente irregular. Cuando boxea al 100%, el británico es capaz de vencer sin problemas a cualquier rival en la categoría, pero es habitual verlo salteadamente ofreciendo un rendimiento muy bajo. Así, el resultado del encuentro parece estar completamente condicionado por la versión que Campbell pueda ofrecer de sí mismo, aunque se debería esperar una pelea igualada y táctica además de muy interesante.
En este evento también destacan tres peleas: el filipino Romero Duno 14(13KO)-1 tratará de agrandar su récord y añadirle brillo derrotando al muy competente Juan Pablo Sánchez 30(14KO)-13(8); Azat Hovhannisyan 12(10KO)-2 y Sergio Frías 19(10KO)7(4)-2 pugnarán por situar su nombre en el ranking WBC del peso supergallo; y el peso pluma Manuel Ávila 22(8KO)-1 intentará recuperarse de su derrota ante Joseph Díaz midiéndose a un Ramiro Robles 14(9KO)-6(2)-1 con mucha experiencia de calidad.
viernes, 22 de septiembre de 2017
Los mejores combates de este viernes (22/9/2017)
Siguiendo la tónica de irregularidad de los viernes de esta temporada, y tras algunas semanas verdaderamente flojas, de nuevo el día de hoy nos deja una interesantísima jornada, en la que sobresalen bastantes duelos y entre ellos dos mundiales.
Uno de ellos será el campeonato WBO del peso pluma entre el monarca Óscar Valdez y el retador Genesis Servania, que encabezará una interesante velada organizada en Tucson (Estados Unidos) por Top Rank.
Podéis leer la previa del mundial Valdez-Servania en este link a Espabox
El semifondo de la cartelera estará a cargo de otro duelo mundialista, en el cual el campeón WBO del peso supermedio Gilberto Ramírez se verá las caras con el aspirante obligatorio Jesse Hart.
Podéis leer la previa del mundial Ramírez-Hart a en este link a Espabox
Además de estos excelentes enfrentamientos, el evento contará con algunas buenas peleas, esencialmente protagonizadas por destacados prospectos de la escuadra de Top Rank. Así, el 4º WBO del peso wélter Egidijus Kavaliauskas 17(14KO)-0 afrontará su primera pelea a 10 asaltos y su mayor test hasta la fecha ante un Mahonry Montes 33(22KO)-6(1)-1 enormemente competente y que llegará a esta pelea tras una importantísima victoria; el oro olímpico Robson Conceiçao 4(3KO)-0 verá puesta a prueba su pegada en una pelea de desarrollo ante el duro nicaragüense Carlos Osorio 13(5KO)-7(3)-1; y el bronce olímpico Michael Conlan 3(3KO)-0 intentará seguir ensanchando su experiencia en un combate sencillo ante Kenny Guzmán 3(1KO)-0.
Dejando de lado esta velada estadounidense, en este viernes se producirán varios combates muy bien emparejados que deberían llevar a sus vencedores a la parte más alta de las listas y dejarlos al alcance de fenomenales oportunidades.
Uno de estos enfrentamientos será el que tendrá lugar en Torrelavega, España, donde el local Sergio García 24(12KO)-0 y el italiano Felice Moncelli 17(5KO)-4-1 pelearán por un probable acceso al top 5 WBC del peso superwélter y por el título Plata del Consejo en posesión del primero. Aunque no tenía victorias de la máxima importancia, cuando llegó a su duelo crucial ante el excampeón de Europa Isaac Real, “El Niño” García supo estar más que a la altura, logrando una solidísima victoria que le ha llevado a este choque crucial, en el que se jugará entrar en lucha directa por el acceso al mundial que posee Jermell Charlo. De todos modos, no tendrá nada fácil culminar su objetivo, ya que en frente tendrá a un Moncelli que sólo ha sumado una ajustadísima derrota a los puntos ante Emanuele Della Rosa en sus últimas catorce peleas y que ha logrado coronarse campeón de Italia, consiguiendo además victorias ante oponentes como Marcello Matano. Aun así, el español partirá como favorito, siendo evidente que si lograse mantener el nivel competitivo mostrado ante Real debería poder sumar el trascendental triunfo necesario para acercarse a sus más altas aspiraciones.
Por otro lado, en Mónaco, televisado por SFR Sport, el francés Andrew Francillete 20(5KO)-0-1 intentará encaramarse al top 15 WBA del peso medio adquiriendo el título Continental de dicho organismo, para lo cual deberá superar también a un duro italiano, Alessandro Goddi 31(15KO)-2-1. Si bien Francillete es considerado un prometedor púgil y se encuentra imbatido, el nivel de oposición que ha tenido que superar no ha sido demasiado elevado, abundando en su trayectoria los boxeadores de récord negativo, habiendo padecido notables dificultades ante el rival más difícil de su trayectoria, un José Manuel López Clavero ante el que sumó una decisión mayoritaria controvertida. Así, Goddi tendrá una buena opción de dar la sorpresa, no sólo por su solidez, su mayor cantidad de rounds o por sus peleas de mayor relieve, sino porque el pasado junio a punto estuvo de coronarse campeón de Europa ante Emanuele Blandamura, que finalmente le venció con polémica y estrecha diferencia de puntos. Es por todo esto que este encuentro también parece muy interesante y con el potencial de ofrecer una contienda realmente buena.
Quizás más alejado de las grandes peleas puede parece Isidro Prieto 26(22KO)-2(1)-3, que en Quilmes, Argentina, con retransmisión de TNT Sports, tratará de recuperarse ante Martín Fidel Ríos 22(12KO)-12(2)-4 de la derrota padecida en un round ante el temible Artur Beterbiev. Sin duda, el encajador Ríos debería garantizarle una apreciable cantidad de trabajo y un rodaje de intensidad y calidad, pero Prieto, que ha sabido plantar cara a uno de los retadores top de la división como Eleider Álvarez, debería hacerse con una amplia victoria. Es precisamente por el buen rendimiento mostrado ante Álvarez que quizás Prieto pueda recibir una buena oportunidad para poner a prueba a algún púgil que aspire a hacerse un hueco en la parte alta de las listas del peso semipesado, por lo que una victoria ante Ríos será el resultado imprescindible para que pueda verse relanzado a grandes escenarios y bolsas.
Finalmente, en cuanto a los boxeadores que podrían lograr este viernes mejorar decisivamente su posición de cara al mundial, se debe mencionar al peso mosca Ángel Moreno 15(5KO)-2-2, extitular de la Unión Europea que en Alcobendas, España, y televisado por GOL, buscará capturar el título WBO Latino, que le garantizaría un hueco en el top 15 de este organismo en su categoría del peso mosca. Quien tratará de impedirlo y lograr para sí mismo el cinto menor será el mexicano José Rivas 15(8KO)-11(2)-4, un boxeador de enorme exigencia que tras una racha de irregularidad y alguna derrota importante, como la sumada ante el ahora campeón José Argumedo, ha logrado una gran estabilidad, sumando siete victorias en ocho peleas, siendo la excepción una derrota dividida ante el excelente exretador mundial Gilberto Parra. Por ello, Moreno tendrá así un reto de grandes proporciones que no sólo le pondrá a prueba como boxeador sino que también evaluará sus posibilidades de pelear por el mundial.
También en el evento, la campeona de Europa del peso mínimo Joana Pastrana 10(3KO)-1 tratará de realizar su segunda defensa como titular continental y acercarse decisivamente a la disputa de su primer campeonato mundial batiendo a la asequible Judit Hachbold 4(0KO)-1.
Para terminar este artículo se debe hacer mención de cuatro escenarios más que completan la jornada:
- En Canadá, el peso ligero Cam O’Connell 15(10KO)-1-1, después de ver frustrada su pretensión de acceder al top 15 WBA al caer derrotado ante Tony Luis, intentará restablecer su racha de triunfos derrotando al fogueado mexicano Guadalupe Rosales 34(18KO)-13(4).
- En Sudáfrica, los peso pluma Lusanda Komanisi 21(18KO)-3(1) y Jack Tepora 20(15KO)-0 combatirán en un interesante duelo que podría aumentar aún más la proyección del imbatido filipino.
- En Ontario (California), Estados Unidos, el peso ligero José Román 24(16KO)-1-1 intentará superar ante el encajador Wilberth López 18(13KO)-8(1) la que debería ser su última pelea a ocho asaltos antes de encarar combates trascendentales a diez rounds.
- En Philadelphia, Estados Unidos, el peso superligero de buen bagaje amateur Devin Haney 16(11KO)-0 disputará el combate más difícil de su carrera ante un peligroso boxeador como Enrique Tinoco 16(12KO)-4(1)-3.
Uno de ellos será el campeonato WBO del peso pluma entre el monarca Óscar Valdez y el retador Genesis Servania, que encabezará una interesante velada organizada en Tucson (Estados Unidos) por Top Rank.
Podéis leer la previa del mundial Valdez-Servania en este link a Espabox
El semifondo de la cartelera estará a cargo de otro duelo mundialista, en el cual el campeón WBO del peso supermedio Gilberto Ramírez se verá las caras con el aspirante obligatorio Jesse Hart.
Podéis leer la previa del mundial Ramírez-Hart a en este link a Espabox
Además de estos excelentes enfrentamientos, el evento contará con algunas buenas peleas, esencialmente protagonizadas por destacados prospectos de la escuadra de Top Rank. Así, el 4º WBO del peso wélter Egidijus Kavaliauskas 17(14KO)-0 afrontará su primera pelea a 10 asaltos y su mayor test hasta la fecha ante un Mahonry Montes 33(22KO)-6(1)-1 enormemente competente y que llegará a esta pelea tras una importantísima victoria; el oro olímpico Robson Conceiçao 4(3KO)-0 verá puesta a prueba su pegada en una pelea de desarrollo ante el duro nicaragüense Carlos Osorio 13(5KO)-7(3)-1; y el bronce olímpico Michael Conlan 3(3KO)-0 intentará seguir ensanchando su experiencia en un combate sencillo ante Kenny Guzmán 3(1KO)-0.
Dejando de lado esta velada estadounidense, en este viernes se producirán varios combates muy bien emparejados que deberían llevar a sus vencedores a la parte más alta de las listas y dejarlos al alcance de fenomenales oportunidades.
Uno de estos enfrentamientos será el que tendrá lugar en Torrelavega, España, donde el local Sergio García 24(12KO)-0 y el italiano Felice Moncelli 17(5KO)-4-1 pelearán por un probable acceso al top 5 WBC del peso superwélter y por el título Plata del Consejo en posesión del primero. Aunque no tenía victorias de la máxima importancia, cuando llegó a su duelo crucial ante el excampeón de Europa Isaac Real, “El Niño” García supo estar más que a la altura, logrando una solidísima victoria que le ha llevado a este choque crucial, en el que se jugará entrar en lucha directa por el acceso al mundial que posee Jermell Charlo. De todos modos, no tendrá nada fácil culminar su objetivo, ya que en frente tendrá a un Moncelli que sólo ha sumado una ajustadísima derrota a los puntos ante Emanuele Della Rosa en sus últimas catorce peleas y que ha logrado coronarse campeón de Italia, consiguiendo además victorias ante oponentes como Marcello Matano. Aun así, el español partirá como favorito, siendo evidente que si lograse mantener el nivel competitivo mostrado ante Real debería poder sumar el trascendental triunfo necesario para acercarse a sus más altas aspiraciones.
Por otro lado, en Mónaco, televisado por SFR Sport, el francés Andrew Francillete 20(5KO)-0-1 intentará encaramarse al top 15 WBA del peso medio adquiriendo el título Continental de dicho organismo, para lo cual deberá superar también a un duro italiano, Alessandro Goddi 31(15KO)-2-1. Si bien Francillete es considerado un prometedor púgil y se encuentra imbatido, el nivel de oposición que ha tenido que superar no ha sido demasiado elevado, abundando en su trayectoria los boxeadores de récord negativo, habiendo padecido notables dificultades ante el rival más difícil de su trayectoria, un José Manuel López Clavero ante el que sumó una decisión mayoritaria controvertida. Así, Goddi tendrá una buena opción de dar la sorpresa, no sólo por su solidez, su mayor cantidad de rounds o por sus peleas de mayor relieve, sino porque el pasado junio a punto estuvo de coronarse campeón de Europa ante Emanuele Blandamura, que finalmente le venció con polémica y estrecha diferencia de puntos. Es por todo esto que este encuentro también parece muy interesante y con el potencial de ofrecer una contienda realmente buena.
Quizás más alejado de las grandes peleas puede parece Isidro Prieto 26(22KO)-2(1)-3, que en Quilmes, Argentina, con retransmisión de TNT Sports, tratará de recuperarse ante Martín Fidel Ríos 22(12KO)-12(2)-4 de la derrota padecida en un round ante el temible Artur Beterbiev. Sin duda, el encajador Ríos debería garantizarle una apreciable cantidad de trabajo y un rodaje de intensidad y calidad, pero Prieto, que ha sabido plantar cara a uno de los retadores top de la división como Eleider Álvarez, debería hacerse con una amplia victoria. Es precisamente por el buen rendimiento mostrado ante Álvarez que quizás Prieto pueda recibir una buena oportunidad para poner a prueba a algún púgil que aspire a hacerse un hueco en la parte alta de las listas del peso semipesado, por lo que una victoria ante Ríos será el resultado imprescindible para que pueda verse relanzado a grandes escenarios y bolsas.
Finalmente, en cuanto a los boxeadores que podrían lograr este viernes mejorar decisivamente su posición de cara al mundial, se debe mencionar al peso mosca Ángel Moreno 15(5KO)-2-2, extitular de la Unión Europea que en Alcobendas, España, y televisado por GOL, buscará capturar el título WBO Latino, que le garantizaría un hueco en el top 15 de este organismo en su categoría del peso mosca. Quien tratará de impedirlo y lograr para sí mismo el cinto menor será el mexicano José Rivas 15(8KO)-11(2)-4, un boxeador de enorme exigencia que tras una racha de irregularidad y alguna derrota importante, como la sumada ante el ahora campeón José Argumedo, ha logrado una gran estabilidad, sumando siete victorias en ocho peleas, siendo la excepción una derrota dividida ante el excelente exretador mundial Gilberto Parra. Por ello, Moreno tendrá así un reto de grandes proporciones que no sólo le pondrá a prueba como boxeador sino que también evaluará sus posibilidades de pelear por el mundial.
También en el evento, la campeona de Europa del peso mínimo Joana Pastrana 10(3KO)-1 tratará de realizar su segunda defensa como titular continental y acercarse decisivamente a la disputa de su primer campeonato mundial batiendo a la asequible Judit Hachbold 4(0KO)-1.
Para terminar este artículo se debe hacer mención de cuatro escenarios más que completan la jornada:
- En Canadá, el peso ligero Cam O’Connell 15(10KO)-1-1, después de ver frustrada su pretensión de acceder al top 15 WBA al caer derrotado ante Tony Luis, intentará restablecer su racha de triunfos derrotando al fogueado mexicano Guadalupe Rosales 34(18KO)-13(4).
- En Sudáfrica, los peso pluma Lusanda Komanisi 21(18KO)-3(1) y Jack Tepora 20(15KO)-0 combatirán en un interesante duelo que podría aumentar aún más la proyección del imbatido filipino.
- En Ontario (California), Estados Unidos, el peso ligero José Román 24(16KO)-1-1 intentará superar ante el encajador Wilberth López 18(13KO)-8(1) la que debería ser su última pelea a ocho asaltos antes de encarar combates trascendentales a diez rounds.
- En Philadelphia, Estados Unidos, el peso superligero de buen bagaje amateur Devin Haney 16(11KO)-0 disputará el combate más difícil de su carrera ante un peligroso boxeador como Enrique Tinoco 16(12KO)-4(1)-3.
miércoles, 20 de septiembre de 2017
¿Qué respuestas nos ha dado el Golovkin-Canelo?
Antes de que comenzase el campeonato mundial WBC, WBA e IBF del peso medio entre el kazajo Gennady Golovkin 37(33KO)-0-1 y el mexicano Saúl “Canelo” Álvarez 49(34KO)-1-2 las preguntas se amontonaban y cruzaban entre ellas en cantidad ingente. Y es que no podía ser de otro modo teniendo en cuenta que este era un encuentro trascendental en la historia del peso medio, en el que dos top de todos los pesos se enfrentaban en un duelo en el que debían demostrar realmente cuál era su potencial y cuáles sus capacidades reales en una pelea en igualdad de condiciones. Así, una vez terminado el enfrentamiento se pudieron extraer lecturas claras e incuestionables que, quizás, no hagan otra cosa que responder a algunas preguntas mientras crean otras nuevas.
Dejando al margen el resultado y la controversia de las cartulinas, y centrándonos sólo en lo deportivo, la lectura más significativa que se puede extraer de la pelea es la confirmación del declive de Golovkin. Puede que muchos se opongan a esta afirmación, considerando estos que mereció la victoria ante el que algunos valoran como el número 1 de todos los pesos. Aun así, y si bien no se puede cuestionar el mérito de su actuación, lo que quedó de manifiesto es que los tiempos en los que se mostraba como una apisonadora imparable han pasado.
“GGG” presionó, una vez más, de forma infinitamente más tenue que en anteriores momentos y su corte de ring, que tantas victorias le ha dado en el pasado, resultó sumamente inefectivo, dejando en todo momento la puerta abierta para que “Canelo” le rehuyese por la derecha. Además, su velocidad de manos fue realmente baja y su volumen de puños escaso también, comparativamente hablando. Por otro lado, cuando sus puños al máximo de potencia hicieron clara diana en su rival, éste los encajó sin ningún tipo de problemas, no siendo ni siquiera estremecido ligeramente. Finalmente, su precisión fue por momentos ridícula, fallando una decena de manos consecutivas a la vez que quedaba totalmente expuesto al contragolpe.
Sea como sea, su tenacidad, su resistencia y su formidable jab le mantuvieron en la lucha por la victoria en una pelea en la que su oponente corrió demasiado, cediendo asaltos por falta de trabajo y contundencia.
Esto nos lleva a otra clara lectura respecto al duelo: la nula acometividad de Canelo. Muchos, erróneamente, esperaban que Álvarez avanzase en todo momento sobre su oponente y golpease al cuerpo con el gancho y con combinaciones al rostro para desgastar y quebrar al monarca. Nada más lejos de la realidad. Decepcionando a quienes querían ver una descarnada batalla de intercambios, “Canelo” demostró que no tenía ninguna confianza en poder romper la resistencia de su adversario, al menos sin poner en riesgo decisivo la suya. Por ello, aunque en su momento criticó durísimamente a Erislandy Lara por su táctica, Canelo corrió el ring sin remordimientos durante gran parte de la pelea, rehusando los intercambios.
Con todo, esto no tiene porqué implicar una falta de valentía, ya que en muchos momentos cometió la osadía de quedarse estático en las cuerdas, incluso bajando las manos, a la vez que eludía uno tras otro los golpes de Golovkin, demostrando una defensa verdaderamente excepcional que muchos ni siquiera sabían que tenía. Además, su precisión, su elección de golpes y su apreciación de los momentos oportunos para lanzarlos (o sea su gestión de los aspectos ofensivos desde una táctica contragolpeadora y conservadora) resultaron extraordinarias.
En este claro choque de estilos resultante, teniendo en cuenta que varios asaltos fueron muy igualados y que hubo fases de evidente dominio para cada boxeador, no nos engañemos, tanto la victoria por un asalto (o sea 7-5) para cada uno de los púgiles como el empate (6-6) resultan aceptables.
Si se es imparcial y se valora globalmente la contienda, ésta estuvo emparejada y ni mucho menos fue totalmente controlada por Golovkin, como algunos afirman. Y es que “el efecto favorito” se dejó notar otra vez después de esta pelea. Tal y como pasó en el primero “Chocolatito”-Wangek o en el Pacquiao-Horn hubo analistas, boxeadores y aficionados que no dieron ni un margen mínimo en su propia lectura de la pelea para la victoria de Wangek y Horn, alterando su propia visión del choque por la sobrevaloración del favorito, en estos casos Román González y Manny Pacquiao, respectivamente. Esto no quiere decir que no se pueda pensar que “Chocolatito” o Pacquiao merecieran la victoria, sino que hay gente que ni siquiera necesitó analizarla imparcialmente para estar seguro al 100% de la total victoria del favorito. Salvando las enormes distancias, ya que ni muchísimo menos estaba Canelo en la posición de Wangek o Horn, esto se repitió en la pugna. Álvarez era calificado como “diva” y había manipulado las reglas del boxeo a su favor y Golovkin era el boxeador que partía como favorito y que no rechazaba retos, e indudablemente las simpatías de muchos, por el propio interés del pugilismo, se alinearon consciente o subconscientemente con el segundo.
De todos modos, no se debe tomar la parte por el todo. Aunque “Canelo” realizó la mejor actuación de su carrera y durante varios asaltos anuló con su fenomenal defensa al boxeador más agresivo y contundente de la división y a uno de los mejores de todos los pesos, esto no puede borrar de un plumazo sus nefastos años de pesos pactados, chantajes a los organismos, elusión de oponentes y elección de otros sumamente asequibles, todo ello sin pasar por alto los atroces robos a boxeadores que claramente le superaron. Así, lo que hay que preguntarse ahora es si “Canelo”, habiendo demostrado su destreza ante uno de los púgiles más peligrosos posibles y habiendo sido bueno su rendimiento en el peso medio, cambiará el planteamiento de su trayectoria y aceptará nuevos retos de enorme exigencia. De lo contrario, quizás no pueda disipar las críticas, que no dejaron de estar presentes en este choque por elegir la pelea en el momento en que Golovkin mostraba evidentes puntos débiles y sirviéndose en ella de nuevo de la ayuda de los jueces.
La puntuación de Adelaide Byrd de 118-110 a favor de “Canelo” es sin lugar a duda no sólo el peor elemento de la contienda o del fin de semana, sino la certificación de que el boxeo tiene que afrontar sus problemas de una vez por todas. Esto no significa que los aficionados, expertos y boxeadores debamos dejar de defender el deporte de las 16 cuerdas ante los que lo critican buscando su destrucción, sino que debemos exigir la limpieza del pugilismo para solidificarlo. Por ejemplo, hasta que los promotores dejen de pagar los salarios, el alojamiento y el mantenimiento de los jueces encargados de puntuar una pelea y del árbitro que vela por el cumplimiento de las reglas y dejen de hacer con ellos cenas y reuniones privadas previas a los enfrentamientos, los resultados polémicos no van a dejar de llegar, puesto que muchos jueces y árbitros no pueden o no quieren priorizar su objetividad y su aprecio por el boxeo sobre su sustento y su modo de vida relajado, cómodo y satisfactorio. Y es que ¿Cómo, por ejemplo, un funcionario o un trabajar estadounidense estándar va a querer renunciar a viajar con todos los gastos pagados a un formidable escenario y ganar en un fin de semana infinitamente más de lo que gana en un mes, además mientras ve en primer línea combates esperadísimos, puntuando una pelea contra los intereses del promotor que le paga, mordiendo la mano que le da de comer? Es un secreto a gritos que muchos jueces que no han seguido los “patrones” esperados por los promotores organizadores no han vuelto a ser llamados para juzgar peleas de estas compañías y que incluso han sido apartados a posiciones secundarias dentro de las comisiones atléticas. Hasta que los salarios de los jueces y árbitros no se extraigan de las sanciones pagadas a las comisiones o se descuenten de las bolsas finales de los boxeadores, sin intermediarios, la situación no va a cambiar, al menos en los combates de las estrellas del boxeo mundial.
Por otra parte, hay que recalcar que Adelaide Byrd no es una mala jueza o una jueza que haya tenido un día malo, es una corrupta al igual que su marido, el árbitro Robert Byrd. Muchos pueden considerar que no hay pruebas de tal cosa, pero realmente sí las hay. Sólo hay que ver su trayectoria de puntuaciones para comprobar que Byrd casi siempre puntúa mal las grandes peleas, decantándose por lecturas absolutas a favor de los favoritos o de los boxeadores estrella de las promotoras, o por los estadounidenses cuando boxean como visitantes. Se puede hacer fácilmente una lista de más de una decena de peleas recientes en las que ha participado en las que se puede ver que su puntuación es sesgada o injustificable. Por otra parte, en cuanto a su marido, sólo tenemos que recordar el escándalo más reciente, su total permisividad con los golpes bajos de Andre Ward en la revancha con Sergey Kovalev y su extranísima detención de la pelea. Así resulta evidente que el matrimonio Byrd son, junto a muchos otros jueces y árbitros, una garantía para que las agendas boxísticas de quienes mueven los hilos en este deporte se cumplan, ya sean estos televisiones, promotores u otro tipo de agentes. Simplemente, la diferencia entre los Byrd y otros es que son ineptos a la hora de ser corruptos, mientras que otros saben actuar con mayor sutileza sin levantar sospechas.
Volviendo al análisis del combate Golovkin-Canelo, éste en cierto modo ha acentuado una modificación de roles que lleva produciéndose desde hace un tiempo atrás y que podría agravarse en una eventual revancha. Entre 2015 y 2016, Golovkin era casi imbatible y en un enfrentamiento entonces ante Canelo su victoria parecía a todas luces inevitable además de contundente. Hay que recordar que, mientras tanto, Álvarez se medía a boxeadores asequibles y ganaba controvertidamente a Miguel Cotto, recibiendo críticas numerosísimas. Pero desde entonces la situación hay ido cambiando. Primero “GGG” daba signos de deterioro ante Kell Brook, que a priori no parecieron significativos, pero después a duras penas pudo vencer a un Daniel Jacobs ante el que no fue ni una sombra de lo que había sido. Por otro lado, su estancamiento o su degradación en su rendimiento se asentaba con este duelo ante “Canelo”, que ha hecho más evidente una sensacional evolución.
Esto nos lleva a la pregunta ¿Qué margen para la mejora tienen ambos contendientes en un eventual duelo de desquite? y ¿Aceptará Canelo una revancha? Respecto a la segunda pregunta ninguna certeza se puede tener debido a los peculiares manejos de Golden Boy Promotions y de “Canelo”, pero parece que, habiendo logrado aguantar bien los doce asaltos, habiendo mejorado su imagen general gracias a esta pelea y contando que podría ingresar una enorme cantidad de dinero con un nuevo choque ante el kazajo, la revancha parece la mejor opción para su carrera. Y es que, respondiendo a la primera pregunta, su margen de mejora es además superior al de Golovkin. Aunque se podía esperar que “GGG” usase una mejor gestión de tiempos y espacios, su planteamiento resultó de lo más simple. Por otra parte, cuando Canelo le atacó, su reacción defensiva fue por lo general bastante mala, encajando golpes claros y retrocediendo algo desordenado. En cambio, “Canelo”, que quizás esté en el punto álgido de su boxeo, demostró superior técnica y versatilidad, pareciendo que con los adecuados ajustes, especialmente a la hora de ceder asaltos por falta de actividad, podría generar más complicaciones a Golovkin. Siempre estará presente, obviamente, el riesgo del knockout, ya que Golovkin en todo momento podrá sacar de la nada una mano de poder que decida la pugna. Además su presión no dejará de otorgarle asaltos por impresión general a la vez que desgasta a sus adversarios. Pero habiendo sido poco brillantes, y cada vez menos, sus actuaciones consecutivas ante Brook, Jacobs y ahora Álvarez, parece que el tiempo juega en contra de Golovkin, que parece haber entrado en una cuesta abajo en la que cada mes que pase le acercará a su primera derrota.
Quizás en este sentido, el equipo de Canelo estudie cuál es el momento más astuto para pactar una revancha. Puede que en mayo, y si consigue mantener inactivo a Golovkin hasta entonces, tenga una buena oportunidad de triunfo, pero no será tan buena como en una pelea en septiembre del próximo año o incluso más allá. Aun así, si ahora mismo Golovkin se tuviese que medir a sus retadores obligatorios como Jermall Charlo y Sergiy Derevyanchenko, que logre salir con el brazo en alto no es ni mucho menos una certeza. Así, el mexicano corre el riesgo de que alguien se adelante destronando a un Golovkin cuya recomposición cada vez parece más improbable.
Por otro lado, para Golovkin ninguna opción podría ser mejor que buscar la unificación total del peso medio contra Saunders (titular WBO) o aceptar un duelo en diciembre ante Miguel Cotto, peleas que podría vencer con el rendimiento que todavía conserva y que deberían servirle para agrandar su legado y su estela exitosa a la vez que se hace con grandes bolsas. Además, un posible ascenso al peso supermedio no debería ser descartado, dado que, aunque su altura no sea la suficiente para la categoría superior, quizás el nivel de sus actuaciones podría recuperarse si es que todos sus problemas recientes han llegado por las dificultades para ajustarse al peso medio.
Sea como sea, ambos boxeadores se encuentran ahora, tras este empate, en una situación de total impasse en la que deberán tomar decisiones decisivas para su futuro e incluso para su papel final en la historia del boxeo. Intereses económicos, deportivos y de otra índole se entremezclaran, junto a la intervención de nuevos boxeadores reclamando oportunidades, haciendo las posibles elecciones tan complejas como difíciles de prever su éxito. Aun así, el peso medio parece mantenerse ahora en un formidable momento y es de esperar que desde diciembre al próximo mayo la división nos ofrezca enfrentamientos formidables y peleas para el recuerdo.
Dejando al margen el resultado y la controversia de las cartulinas, y centrándonos sólo en lo deportivo, la lectura más significativa que se puede extraer de la pelea es la confirmación del declive de Golovkin. Puede que muchos se opongan a esta afirmación, considerando estos que mereció la victoria ante el que algunos valoran como el número 1 de todos los pesos. Aun así, y si bien no se puede cuestionar el mérito de su actuación, lo que quedó de manifiesto es que los tiempos en los que se mostraba como una apisonadora imparable han pasado.
“GGG” presionó, una vez más, de forma infinitamente más tenue que en anteriores momentos y su corte de ring, que tantas victorias le ha dado en el pasado, resultó sumamente inefectivo, dejando en todo momento la puerta abierta para que “Canelo” le rehuyese por la derecha. Además, su velocidad de manos fue realmente baja y su volumen de puños escaso también, comparativamente hablando. Por otro lado, cuando sus puños al máximo de potencia hicieron clara diana en su rival, éste los encajó sin ningún tipo de problemas, no siendo ni siquiera estremecido ligeramente. Finalmente, su precisión fue por momentos ridícula, fallando una decena de manos consecutivas a la vez que quedaba totalmente expuesto al contragolpe.
Sea como sea, su tenacidad, su resistencia y su formidable jab le mantuvieron en la lucha por la victoria en una pelea en la que su oponente corrió demasiado, cediendo asaltos por falta de trabajo y contundencia.
Esto nos lleva a otra clara lectura respecto al duelo: la nula acometividad de Canelo. Muchos, erróneamente, esperaban que Álvarez avanzase en todo momento sobre su oponente y golpease al cuerpo con el gancho y con combinaciones al rostro para desgastar y quebrar al monarca. Nada más lejos de la realidad. Decepcionando a quienes querían ver una descarnada batalla de intercambios, “Canelo” demostró que no tenía ninguna confianza en poder romper la resistencia de su adversario, al menos sin poner en riesgo decisivo la suya. Por ello, aunque en su momento criticó durísimamente a Erislandy Lara por su táctica, Canelo corrió el ring sin remordimientos durante gran parte de la pelea, rehusando los intercambios.
Con todo, esto no tiene porqué implicar una falta de valentía, ya que en muchos momentos cometió la osadía de quedarse estático en las cuerdas, incluso bajando las manos, a la vez que eludía uno tras otro los golpes de Golovkin, demostrando una defensa verdaderamente excepcional que muchos ni siquiera sabían que tenía. Además, su precisión, su elección de golpes y su apreciación de los momentos oportunos para lanzarlos (o sea su gestión de los aspectos ofensivos desde una táctica contragolpeadora y conservadora) resultaron extraordinarias.
En este claro choque de estilos resultante, teniendo en cuenta que varios asaltos fueron muy igualados y que hubo fases de evidente dominio para cada boxeador, no nos engañemos, tanto la victoria por un asalto (o sea 7-5) para cada uno de los púgiles como el empate (6-6) resultan aceptables.
Si se es imparcial y se valora globalmente la contienda, ésta estuvo emparejada y ni mucho menos fue totalmente controlada por Golovkin, como algunos afirman. Y es que “el efecto favorito” se dejó notar otra vez después de esta pelea. Tal y como pasó en el primero “Chocolatito”-Wangek o en el Pacquiao-Horn hubo analistas, boxeadores y aficionados que no dieron ni un margen mínimo en su propia lectura de la pelea para la victoria de Wangek y Horn, alterando su propia visión del choque por la sobrevaloración del favorito, en estos casos Román González y Manny Pacquiao, respectivamente. Esto no quiere decir que no se pueda pensar que “Chocolatito” o Pacquiao merecieran la victoria, sino que hay gente que ni siquiera necesitó analizarla imparcialmente para estar seguro al 100% de la total victoria del favorito. Salvando las enormes distancias, ya que ni muchísimo menos estaba Canelo en la posición de Wangek o Horn, esto se repitió en la pugna. Álvarez era calificado como “diva” y había manipulado las reglas del boxeo a su favor y Golovkin era el boxeador que partía como favorito y que no rechazaba retos, e indudablemente las simpatías de muchos, por el propio interés del pugilismo, se alinearon consciente o subconscientemente con el segundo.
De todos modos, no se debe tomar la parte por el todo. Aunque “Canelo” realizó la mejor actuación de su carrera y durante varios asaltos anuló con su fenomenal defensa al boxeador más agresivo y contundente de la división y a uno de los mejores de todos los pesos, esto no puede borrar de un plumazo sus nefastos años de pesos pactados, chantajes a los organismos, elusión de oponentes y elección de otros sumamente asequibles, todo ello sin pasar por alto los atroces robos a boxeadores que claramente le superaron. Así, lo que hay que preguntarse ahora es si “Canelo”, habiendo demostrado su destreza ante uno de los púgiles más peligrosos posibles y habiendo sido bueno su rendimiento en el peso medio, cambiará el planteamiento de su trayectoria y aceptará nuevos retos de enorme exigencia. De lo contrario, quizás no pueda disipar las críticas, que no dejaron de estar presentes en este choque por elegir la pelea en el momento en que Golovkin mostraba evidentes puntos débiles y sirviéndose en ella de nuevo de la ayuda de los jueces.
La puntuación de Adelaide Byrd de 118-110 a favor de “Canelo” es sin lugar a duda no sólo el peor elemento de la contienda o del fin de semana, sino la certificación de que el boxeo tiene que afrontar sus problemas de una vez por todas. Esto no significa que los aficionados, expertos y boxeadores debamos dejar de defender el deporte de las 16 cuerdas ante los que lo critican buscando su destrucción, sino que debemos exigir la limpieza del pugilismo para solidificarlo. Por ejemplo, hasta que los promotores dejen de pagar los salarios, el alojamiento y el mantenimiento de los jueces encargados de puntuar una pelea y del árbitro que vela por el cumplimiento de las reglas y dejen de hacer con ellos cenas y reuniones privadas previas a los enfrentamientos, los resultados polémicos no van a dejar de llegar, puesto que muchos jueces y árbitros no pueden o no quieren priorizar su objetividad y su aprecio por el boxeo sobre su sustento y su modo de vida relajado, cómodo y satisfactorio. Y es que ¿Cómo, por ejemplo, un funcionario o un trabajar estadounidense estándar va a querer renunciar a viajar con todos los gastos pagados a un formidable escenario y ganar en un fin de semana infinitamente más de lo que gana en un mes, además mientras ve en primer línea combates esperadísimos, puntuando una pelea contra los intereses del promotor que le paga, mordiendo la mano que le da de comer? Es un secreto a gritos que muchos jueces que no han seguido los “patrones” esperados por los promotores organizadores no han vuelto a ser llamados para juzgar peleas de estas compañías y que incluso han sido apartados a posiciones secundarias dentro de las comisiones atléticas. Hasta que los salarios de los jueces y árbitros no se extraigan de las sanciones pagadas a las comisiones o se descuenten de las bolsas finales de los boxeadores, sin intermediarios, la situación no va a cambiar, al menos en los combates de las estrellas del boxeo mundial.
Por otra parte, hay que recalcar que Adelaide Byrd no es una mala jueza o una jueza que haya tenido un día malo, es una corrupta al igual que su marido, el árbitro Robert Byrd. Muchos pueden considerar que no hay pruebas de tal cosa, pero realmente sí las hay. Sólo hay que ver su trayectoria de puntuaciones para comprobar que Byrd casi siempre puntúa mal las grandes peleas, decantándose por lecturas absolutas a favor de los favoritos o de los boxeadores estrella de las promotoras, o por los estadounidenses cuando boxean como visitantes. Se puede hacer fácilmente una lista de más de una decena de peleas recientes en las que ha participado en las que se puede ver que su puntuación es sesgada o injustificable. Por otra parte, en cuanto a su marido, sólo tenemos que recordar el escándalo más reciente, su total permisividad con los golpes bajos de Andre Ward en la revancha con Sergey Kovalev y su extranísima detención de la pelea. Así resulta evidente que el matrimonio Byrd son, junto a muchos otros jueces y árbitros, una garantía para que las agendas boxísticas de quienes mueven los hilos en este deporte se cumplan, ya sean estos televisiones, promotores u otro tipo de agentes. Simplemente, la diferencia entre los Byrd y otros es que son ineptos a la hora de ser corruptos, mientras que otros saben actuar con mayor sutileza sin levantar sospechas.
Volviendo al análisis del combate Golovkin-Canelo, éste en cierto modo ha acentuado una modificación de roles que lleva produciéndose desde hace un tiempo atrás y que podría agravarse en una eventual revancha. Entre 2015 y 2016, Golovkin era casi imbatible y en un enfrentamiento entonces ante Canelo su victoria parecía a todas luces inevitable además de contundente. Hay que recordar que, mientras tanto, Álvarez se medía a boxeadores asequibles y ganaba controvertidamente a Miguel Cotto, recibiendo críticas numerosísimas. Pero desde entonces la situación hay ido cambiando. Primero “GGG” daba signos de deterioro ante Kell Brook, que a priori no parecieron significativos, pero después a duras penas pudo vencer a un Daniel Jacobs ante el que no fue ni una sombra de lo que había sido. Por otro lado, su estancamiento o su degradación en su rendimiento se asentaba con este duelo ante “Canelo”, que ha hecho más evidente una sensacional evolución.
Esto nos lleva a la pregunta ¿Qué margen para la mejora tienen ambos contendientes en un eventual duelo de desquite? y ¿Aceptará Canelo una revancha? Respecto a la segunda pregunta ninguna certeza se puede tener debido a los peculiares manejos de Golden Boy Promotions y de “Canelo”, pero parece que, habiendo logrado aguantar bien los doce asaltos, habiendo mejorado su imagen general gracias a esta pelea y contando que podría ingresar una enorme cantidad de dinero con un nuevo choque ante el kazajo, la revancha parece la mejor opción para su carrera. Y es que, respondiendo a la primera pregunta, su margen de mejora es además superior al de Golovkin. Aunque se podía esperar que “GGG” usase una mejor gestión de tiempos y espacios, su planteamiento resultó de lo más simple. Por otra parte, cuando Canelo le atacó, su reacción defensiva fue por lo general bastante mala, encajando golpes claros y retrocediendo algo desordenado. En cambio, “Canelo”, que quizás esté en el punto álgido de su boxeo, demostró superior técnica y versatilidad, pareciendo que con los adecuados ajustes, especialmente a la hora de ceder asaltos por falta de actividad, podría generar más complicaciones a Golovkin. Siempre estará presente, obviamente, el riesgo del knockout, ya que Golovkin en todo momento podrá sacar de la nada una mano de poder que decida la pugna. Además su presión no dejará de otorgarle asaltos por impresión general a la vez que desgasta a sus adversarios. Pero habiendo sido poco brillantes, y cada vez menos, sus actuaciones consecutivas ante Brook, Jacobs y ahora Álvarez, parece que el tiempo juega en contra de Golovkin, que parece haber entrado en una cuesta abajo en la que cada mes que pase le acercará a su primera derrota.
Quizás en este sentido, el equipo de Canelo estudie cuál es el momento más astuto para pactar una revancha. Puede que en mayo, y si consigue mantener inactivo a Golovkin hasta entonces, tenga una buena oportunidad de triunfo, pero no será tan buena como en una pelea en septiembre del próximo año o incluso más allá. Aun así, si ahora mismo Golovkin se tuviese que medir a sus retadores obligatorios como Jermall Charlo y Sergiy Derevyanchenko, que logre salir con el brazo en alto no es ni mucho menos una certeza. Así, el mexicano corre el riesgo de que alguien se adelante destronando a un Golovkin cuya recomposición cada vez parece más improbable.
Por otro lado, para Golovkin ninguna opción podría ser mejor que buscar la unificación total del peso medio contra Saunders (titular WBO) o aceptar un duelo en diciembre ante Miguel Cotto, peleas que podría vencer con el rendimiento que todavía conserva y que deberían servirle para agrandar su legado y su estela exitosa a la vez que se hace con grandes bolsas. Además, un posible ascenso al peso supermedio no debería ser descartado, dado que, aunque su altura no sea la suficiente para la categoría superior, quizás el nivel de sus actuaciones podría recuperarse si es que todos sus problemas recientes han llegado por las dificultades para ajustarse al peso medio.
Sea como sea, ambos boxeadores se encuentran ahora, tras este empate, en una situación de total impasse en la que deberán tomar decisiones decisivas para su futuro e incluso para su papel final en la historia del boxeo. Intereses económicos, deportivos y de otra índole se entremezclaran, junto a la intervención de nuevos boxeadores reclamando oportunidades, haciendo las posibles elecciones tan complejas como difíciles de prever su éxito. Aun así, el peso medio parece mantenerse ahora en un formidable momento y es de esperar que desde diciembre al próximo mayo la división nos ofrezca enfrentamientos formidables y peleas para el recuerdo.
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martes, 19 de septiembre de 2017
Callum Smith – Erik Skoglund (16/9/2017)
Echo Arena, Liverpool, Reino Unido.
Cuartos de final del torneo World Boxing Super Series en la modalidad del peso supermedio.
Que Smith fuese tan sumamente contundente en sus últimas cinco subidas a un ring hizo que muchos subestimasen el reto que afrontaba en la primera ronda de las World Boxing Super Series, puesto que, si bien era innegable que sería el favorito para conseguir una clara victoria, cosa que hizo, algunos pensaron que Skoglund no sería rival. Muy al contrario, el imbatido sueco demostró sus cualidades en el mayor reto de su carrera, ofreciendo una de sus mejores actuaciones (muy superior a la ofrecida ante oponentes más asequibles) y otorgando unos buenos rounds de experiencia al prometedor británico.
Dado que ambos son dos boxeadores muy altos para la categoría y con brazos muy largos, no tuvieron en esta ocasión las facilidades físicas que tuvieron en el pasado sobre otros rivales, teniendo que emplearse a fondo con el jab para intentar marcar la diferencia. Aun así, y aunque Skoglund usó un superior juego de piernas que complicó mucho el despliegue ofensivo de su contrincante, Smith se mostraba más preciso con los golpes de poder, especialmente con el directo, por lo que logró una cadena inicial de asaltos que resultaría clave.
Pasados los minutos, “Mundo” Smith logró acortar la distancia y resultar más amenazador, pero Skoglund contragolpearía con destreza, en especial con combos de curvos, que pronto revertieron la situación. Y es que en el quinto episodio podría presionar con su jab, conducir a su adversario a las cuerdas y llegarle con algunos buenos puños que provocaron una seria hemorragia nasal a Smith. Obligado por las circunstancias, el local pasó a combatir con una mayor actividad y frecuencia de golpeo para no dejar trabajar con comodidad a su rival, al que alcanzó con la combinación jab-gancho diestro. De todos modos, los problemas para respirar con normalidad, añadidos a cierto cansancio, impidieron que Smith pudiese retomar plenamente el control, todo ello a la vez que un Skoglund valiente y firme en sus objetivos seguía jabeando e imponiéndose en los eventuales intercambios de golpes, en los que podía hacer valer su mayor energía.
A pesar de la igualdad de algunos de los episodios, en el último tramo de la contienda la pegada de Smith surgió para sellar su triunfo. En el noveno asalto llegó con duros hooks diestros, derechas rectas y ganchos al cuerpo, que siguieron llegando en el décimo round. Así se pusieron las bases para que en el undécimo episodio un recto estremeciese a Skoglund, que sería derribado tras repetidos ganchos al rostro. Finalmente, el visitante superaría los malos momentos y conseguiría no sólo responder sino ofrecer un contendido último episodio, que selló una pelea buena y en la que se debe destacar la excelente deportividad de ambos boxeadores.
Como era lógico, los jueces otorgaron la victoria unánime a Callum “Mundo” Smith 23(17KO)-0 con acertadas cartulinas de 116-112, 117-111 y 117-110, de las cuales, igualmente, la última parece la más correcta. El enfrentamiento y el triunfo de Smith deben ser valorados de manera justa. No era un choque entre uno de los tres mejores retadores de la división contra un prospecto sobreprotegido sin cualidades sino un choque táctico, equilibrado en los aspectos físicos y con dos púgiles de buena calidad técnica que dejó, como era lógico, interesantes rounds, en los cuales la superior experiencia de calidad de Smith y su mayor pegada terminaron por decantar la pugna. Ciertamente, algunos pensarán aun así que este triunfo de Smith, que por ejemplo se coronó campeón de Europa noqueando en un asalto a un competente Hadillah Mohoumadi, es un retroceso respecto a anteriores peleas, pero en realidad parece que Skoglund 26(12KO)-1 supo estar a la altura de las circunstancias y demostró a los que le subestimaron que cometieron un error. Sea como sea, Smith logró un triunfo con cierta amplitud, además después de una inactividad de nueve meses, que debería ser más que suficiente para otorgarle una amplia condición de favorito en la semifinal del torneo, en la que se enfrentará al vencedor del choque entre Jürgen Brähmer y Rob Brant del 27 de octubre.
Cuartos de final del torneo World Boxing Super Series en la modalidad del peso supermedio.
Que Smith fuese tan sumamente contundente en sus últimas cinco subidas a un ring hizo que muchos subestimasen el reto que afrontaba en la primera ronda de las World Boxing Super Series, puesto que, si bien era innegable que sería el favorito para conseguir una clara victoria, cosa que hizo, algunos pensaron que Skoglund no sería rival. Muy al contrario, el imbatido sueco demostró sus cualidades en el mayor reto de su carrera, ofreciendo una de sus mejores actuaciones (muy superior a la ofrecida ante oponentes más asequibles) y otorgando unos buenos rounds de experiencia al prometedor británico.
Dado que ambos son dos boxeadores muy altos para la categoría y con brazos muy largos, no tuvieron en esta ocasión las facilidades físicas que tuvieron en el pasado sobre otros rivales, teniendo que emplearse a fondo con el jab para intentar marcar la diferencia. Aun así, y aunque Skoglund usó un superior juego de piernas que complicó mucho el despliegue ofensivo de su contrincante, Smith se mostraba más preciso con los golpes de poder, especialmente con el directo, por lo que logró una cadena inicial de asaltos que resultaría clave.
Pasados los minutos, “Mundo” Smith logró acortar la distancia y resultar más amenazador, pero Skoglund contragolpearía con destreza, en especial con combos de curvos, que pronto revertieron la situación. Y es que en el quinto episodio podría presionar con su jab, conducir a su adversario a las cuerdas y llegarle con algunos buenos puños que provocaron una seria hemorragia nasal a Smith. Obligado por las circunstancias, el local pasó a combatir con una mayor actividad y frecuencia de golpeo para no dejar trabajar con comodidad a su rival, al que alcanzó con la combinación jab-gancho diestro. De todos modos, los problemas para respirar con normalidad, añadidos a cierto cansancio, impidieron que Smith pudiese retomar plenamente el control, todo ello a la vez que un Skoglund valiente y firme en sus objetivos seguía jabeando e imponiéndose en los eventuales intercambios de golpes, en los que podía hacer valer su mayor energía.
A pesar de la igualdad de algunos de los episodios, en el último tramo de la contienda la pegada de Smith surgió para sellar su triunfo. En el noveno asalto llegó con duros hooks diestros, derechas rectas y ganchos al cuerpo, que siguieron llegando en el décimo round. Así se pusieron las bases para que en el undécimo episodio un recto estremeciese a Skoglund, que sería derribado tras repetidos ganchos al rostro. Finalmente, el visitante superaría los malos momentos y conseguiría no sólo responder sino ofrecer un contendido último episodio, que selló una pelea buena y en la que se debe destacar la excelente deportividad de ambos boxeadores.
Como era lógico, los jueces otorgaron la victoria unánime a Callum “Mundo” Smith 23(17KO)-0 con acertadas cartulinas de 116-112, 117-111 y 117-110, de las cuales, igualmente, la última parece la más correcta. El enfrentamiento y el triunfo de Smith deben ser valorados de manera justa. No era un choque entre uno de los tres mejores retadores de la división contra un prospecto sobreprotegido sin cualidades sino un choque táctico, equilibrado en los aspectos físicos y con dos púgiles de buena calidad técnica que dejó, como era lógico, interesantes rounds, en los cuales la superior experiencia de calidad de Smith y su mayor pegada terminaron por decantar la pugna. Ciertamente, algunos pensarán aun así que este triunfo de Smith, que por ejemplo se coronó campeón de Europa noqueando en un asalto a un competente Hadillah Mohoumadi, es un retroceso respecto a anteriores peleas, pero en realidad parece que Skoglund 26(12KO)-1 supo estar a la altura de las circunstancias y demostró a los que le subestimaron que cometieron un error. Sea como sea, Smith logró un triunfo con cierta amplitud, además después de una inactividad de nueve meses, que debería ser más que suficiente para otorgarle una amplia condición de favorito en la semifinal del torneo, en la que se enfrentará al vencedor del choque entre Jürgen Brähmer y Rob Brant del 27 de octubre.
Billy Joe Saunders – Willie Monroe Jr. (16/9/2017)
Copper Box Arena, Londres, Reino Unido.
Campeonato del mundo WBO del peso medio. Segunda puesta en juego de su cinturón por parte del monarca Saunders y primera defensa obligatoria.
Resultaba evidente para todo aquel que hubiese visto a ambos boxeadores con anterioridad que el mundial del peso medio entre Saunders y Monroe no iba a ser una pelea llena de intercambios y de emoción, sino más bien un choque de corte táctico y con un bajo ritmo combativo. De todos modos, el enfrentamiento terminó siendo mucho menos intenso de lo que incluso se podía esperar, resultando por momentos verdaderamente tedioso.
Y es que, más que el cauteloso despliegue ofensivo de dos boxeadores técnicos, el enfrentamiento fue una decepcionante pelea en la que la superior elección de golpes, precisión y astucia de Saunders se impuso en todo momento a un Monroe que cuando terminó el combate reflejaba en su rostro la decepción por saber que había desperdiciado con un insulso planteamiento la que podría ser su última oportunidad mundialista en la división del peso medio.
El enfrentamiento no tuvo historia alguna. Ambos permanecieron la mayoría del rato cercanos al centro del ring, bastante estáticos y aguardado el momento para conectar sus golpes, momento que nunca llegaba pronto. Finalmente, tras algunos amagos y resituar su posición, el jab de Saunders hacia diana contra el retador, que en ocasiones conectaba su directo de izquierda al ataque o a la contra. Por lo demás, la pelea no tuvo más variaciones que alguna arremetida de Saunders, que alcanzó con directos descendentes a un Monroe tan impreciso defensiva como ofensivamente, y, en el tramo final, algún intento de usar los ganchos al cuerpo por parte del estadounidense, acción que no fue desacertada pero que llegó tardísimo.
Si Monroe hubiese acelerado sus pasos y, aceptando el riesgo de ser alcanzado, hubiese acortado los espacios y hubiese utilizado sus curvos en rápida combinación (como ha hecho en el pasado) quizás no habría logrado la victoria, aunque ésta hubiese sido infinitamente más probable y, sobre todo, su imagen como boxeador no se habría visto tan afectada. Pero aguardado a que el astuto Saunders se lanzase al ataque no hizo otra cosa que regalarle el triunfo al británico, que sin precipitarse sólo tuvo que hacer valer su destreza para puntuar y sus buenas esquivas para, contando esta vez con un perfecto estado de forma, dominar a un oponente que no tuvo más dificultades que un corte por cabezazo involuntario.
De todos modos, aunque la victoria de Billy Joe Saunders 25(12KO)-0 fue realmente clara, los jueces se mostraron generosos con Monroe 21(6KO)-3(1), dando tarjetas de 117-111, 117-112 y un 115-114 totalmente ridículo, incomprensible e inaceptable. En cualquier caso, si algo ha dejado claro el enfrentamiento es que Saunders efectivamente se ha tomado en serio su preparación y que ha dejado atrás los excesos que casi le cuestan el cinturón mundial ante Artur Akavov, mostrando un estado de forma óptimo que le permitió ejecutar su dominio táctico a la perfección. Por otro lado, una vez más quedó de manifiesto que Saunders no tiene ni la potencia, ni la acometividad, ni la fluidez en el aprovechamiento de sus habilidades para poder imponerse a Golovkin o Canelo, respecto a los que comparativamente quedó en una pésima posición al situar su defensa sólo a unas horas de diferencia. Así, si bien la imagen de Saunders mejora respecto a su última subida a un ring, sigue pareciendo por debajo del nivel de la cúpula de la división, siendo casi tan inevitable que próximamente logre una espléndida pelea ante un púgil de la élite como Lemieux o Jacobs como que pueda perderla.
Campeonato del mundo WBO del peso medio. Segunda puesta en juego de su cinturón por parte del monarca Saunders y primera defensa obligatoria.
Resultaba evidente para todo aquel que hubiese visto a ambos boxeadores con anterioridad que el mundial del peso medio entre Saunders y Monroe no iba a ser una pelea llena de intercambios y de emoción, sino más bien un choque de corte táctico y con un bajo ritmo combativo. De todos modos, el enfrentamiento terminó siendo mucho menos intenso de lo que incluso se podía esperar, resultando por momentos verdaderamente tedioso.
Y es que, más que el cauteloso despliegue ofensivo de dos boxeadores técnicos, el enfrentamiento fue una decepcionante pelea en la que la superior elección de golpes, precisión y astucia de Saunders se impuso en todo momento a un Monroe que cuando terminó el combate reflejaba en su rostro la decepción por saber que había desperdiciado con un insulso planteamiento la que podría ser su última oportunidad mundialista en la división del peso medio.
El enfrentamiento no tuvo historia alguna. Ambos permanecieron la mayoría del rato cercanos al centro del ring, bastante estáticos y aguardado el momento para conectar sus golpes, momento que nunca llegaba pronto. Finalmente, tras algunos amagos y resituar su posición, el jab de Saunders hacia diana contra el retador, que en ocasiones conectaba su directo de izquierda al ataque o a la contra. Por lo demás, la pelea no tuvo más variaciones que alguna arremetida de Saunders, que alcanzó con directos descendentes a un Monroe tan impreciso defensiva como ofensivamente, y, en el tramo final, algún intento de usar los ganchos al cuerpo por parte del estadounidense, acción que no fue desacertada pero que llegó tardísimo.
Si Monroe hubiese acelerado sus pasos y, aceptando el riesgo de ser alcanzado, hubiese acortado los espacios y hubiese utilizado sus curvos en rápida combinación (como ha hecho en el pasado) quizás no habría logrado la victoria, aunque ésta hubiese sido infinitamente más probable y, sobre todo, su imagen como boxeador no se habría visto tan afectada. Pero aguardado a que el astuto Saunders se lanzase al ataque no hizo otra cosa que regalarle el triunfo al británico, que sin precipitarse sólo tuvo que hacer valer su destreza para puntuar y sus buenas esquivas para, contando esta vez con un perfecto estado de forma, dominar a un oponente que no tuvo más dificultades que un corte por cabezazo involuntario.
De todos modos, aunque la victoria de Billy Joe Saunders 25(12KO)-0 fue realmente clara, los jueces se mostraron generosos con Monroe 21(6KO)-3(1), dando tarjetas de 117-111, 117-112 y un 115-114 totalmente ridículo, incomprensible e inaceptable. En cualquier caso, si algo ha dejado claro el enfrentamiento es que Saunders efectivamente se ha tomado en serio su preparación y que ha dejado atrás los excesos que casi le cuestan el cinturón mundial ante Artur Akavov, mostrando un estado de forma óptimo que le permitió ejecutar su dominio táctico a la perfección. Por otro lado, una vez más quedó de manifiesto que Saunders no tiene ni la potencia, ni la acometividad, ni la fluidez en el aprovechamiento de sus habilidades para poder imponerse a Golovkin o Canelo, respecto a los que comparativamente quedó en una pésima posición al situar su defensa sólo a unas horas de diferencia. Así, si bien la imagen de Saunders mejora respecto a su última subida a un ring, sigue pareciendo por debajo del nivel de la cúpula de la división, siendo casi tan inevitable que próximamente logre una espléndida pelea ante un púgil de la élite como Lemieux o Jacobs como que pueda perderla.
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